«Debemos lograr una equiparación salarial y la transparencia es la mejor fórmula»
El talento femenino cada vez tiene más valor en el sector farmacéutico
Debemos reconocer, visibilizar y normalizar que el éxito laboral también es cosa de mujeres»
ElEl sector famacéutico cuenta con un amplio número de mujeres, pero son aún los hombres quienes lideran los puestos más altos de la industria. El avance de la sociedad está luchando contra esta desigualdad, pero sigue siendo una realidad. Un hecho que reconoce Remedios Navarro, cofundadora de Atida | Mifarma y directora de desarrollo de negocio, con quien LA RAZÓN ha charlado acerca de las claves para que el liderazgo femenino tenga mayor presencia en el ámbito empresarial.
El porcentaje de mujeres en puestos directivo ses mucho menor al de los hombres, ¿por qué?
La reciente in corporación dela mujer al trabajo es una de las razones que ha llevado a que sea el hombre quien ocupa un puesto de dirección. Esto ha cambiado, pues las empresas cuentan con mujeres talentosas y muy preparadas para desempeñar funciones directivas. Lo que ocurre es que todavía debemos superar el reconocido como «techo de cristal» que impide a la mujer alcanzar determinados objetivos laborales. Muchas de las razones residen en la carga familiar. Aun contando con formación académica y una amplia trayectoria laboral, muchas compañías apuestan por el talento masculino y prefieren prescindir de las directivas que tienen responsabilidad en el ámbito doméstico. Esto es un grave error. Apostar por eliminar ala mujer de rol es directivos supondrá pérdidas económicas a largo plazo, ya que forman parte de la sociedady son un rol clave que se debe tener en cuenta en muchísimas compañías.
A pesar de que el sector farmacéutico tiene más presencia femenina que masculina, la mayoría de los altos cargos están liderados por hombres...
Aquí volvemos al «techo de cristal». El 70% del personal farmacéutico está conformado por mujeres y entre los distintos sectores, es uno de los que cuentan con más directivas. Esto significa que vamos en la dirección correcta, aunque aún queda mucho por hacer. La mujer directiva siempre suele admitir que ha tenido que esforzarse más que los demás y, sobre todo, que ha tenido que demostrar su valía más que otros directivos. Esto se debe a los roles de género, que es cierto que en el ámbito farmacéutico se han ido disipando, pero en otros ámbitos aún continúan existiendo.
¿Podría decirse que gracias al teletrabajo se valora más el talento femenino?
La pandemia de la Covid-19 ha cambiado drásticamente los modelos de trabajo. De hecho, en el ámbito farmacéutico ha supuesto un impulso del comercio electrónico y el consumo de productos de autocuidado a distancia. En cuanto al valor del talento, creo que es pronto para saber si han cambiado las tendencias de contratación poniéndo en valor el talento antes que el género. Eso sí, desde Atida | Mifarma venimos haciéndolo desde hace años, apostado por el talento femenino. De ahí que hayamos posicionado a mujeres en puestos directivos y creado referentes en el sector. Todo esto representa la apuesta que hemos hecho desde nuestros inicios, no solo por las mujeres, si no por el talento con independencia del género.
Las redes sociales han potenciado la libertad de expresión en temas de igualdad, ¿qué papel tienen?
Las redes sociales son un canal de comunicación que ofrece la oportunidad de crear referentes femeninos y poner voz a divulgadoras científicas. Además de llevar a cabo mi labor como farmacéutica y directiva, he tenido la oportunidad de divulgar información útil a través de ellas, dando a conocer mi trabajo y visibilizando el potencial femenino en el ámbito laboral. En definitiva, las redes sociales son un canal de libertad de expresión en materia de igualdad, pero no solamente en ese aspecto. Sirven para crear líderes de opinión fuera de los estándares habituales y dar a conocer a mujeres talentosas y sus conocimientos.
¿Cuál es el toque necesario para que lidere la igualdad en las empresas?
La objetividad, honestidad y meritocracia. Eliminar el concepto de género o sexo en el ámbito profesional es necesario, ya que no es relevante. Cualquier criterio o decisión tomada en una compañía, en base a sus trabajadores, debe premiar otros factores.
¿De qué manera Atida | Mifarma incorpora un plan de igualdad en su empresa? ¿Cómo surgió esa necesidad?
Apostamos por el talento femenino a través de programas de proyección, no solo para que escalen de manera jerárquica en el organigrama sino para crear mujeres referentes en el ámbito de la farmacia, la salud y el autocuidado.
¿Qué medidas toman para ampliar el papel de la mujer en la empresa?
Las medidas que impulsamos en la compañía están centradas en fomentar fomentar y apoyar al talento femenino. En la actualidad, la plantilla de Atida | Mifarma está compuesta por un 70% de mujeres frente al 30% de hombres. Además, no solo mi perfil es el que tiene presencia en cargos de dirección, sino que también contamos con una mujer más en este órgano: Raquel Guirao, como COO al frente del departamento de logística y atención al cliente.Y la CEO de Atida, el grupo de salud y bienestar del que formamos parte, es Julie Szudarek, cuyo papel es primordial para el negocio así como el progreso en igualdad de oportunidades y derechos de la empresa.
Durante el foro aseguraba que las mujeres negocian menos los sueldos que los hombres, ¿es gran parte del problema de la brecha salarial?
Es probable que la cultura y sociedad en la que vivimos induzcan a que la mujer sea más conformista y tenga que ser «agradecida» con su éxito laboral. En cambio, el hombre es posible que negocie más por las posibilidades de lograr un ascenso económico y laboral que suelen tener. Esto no significa que sea la razón de la actual brecha salarial, si no que es importante tener en cuenta que educamos de forma diferente a las mujeres y a los hombres, viéndose reflejado en el ámbito laboral. Además de trabajar desde la educación, debemos centrar nuestros esfuerzos en lograr una auténtica equiparación salarial y la transparencia es la mejor fórmula.
Muchas personas creen que la desigualdad es, en parte, culpa de la propia mujer, ¿qué mensaje les daría?
Les transmitiría que es un mensaje absolutamente equívoco. Son tantas las mujeres que vuelcan todos sus esfuerzos en cambiar el futuro del rol de la mujer en la sociedad, que no puede sostenerse ese argumento. Las mujeres cambiamos el mundo cada día trabajando y demostrando que somos capaces de llegar a puestos directivos. De hecho, lo que necesitamos es el apoyo de todos los hombres y de cualquiera para lograr la igualdad.
¿Estamos lejos de la igualdad?
Queda mucho camino, pero reconozcamos lo recorrido. Tenemos a grandes directivas, científicas, periodistas, empresarias y profesionales de distintos ámbitos que cuentan con grandes éxitos y brindan un gran valor a la sociedad con su trabajo. Debemos reconocerlas, ensalzarlas, tomarlas como modelos y referencias para visibilizar y normalizar que el éxito laboral también es cosa de mujeres.