Indignación en el vestuario del Madrid
► La actuación arbitral marca el tercer partido de la final. El Barça habla de «intimidación» a los árbitros
La final de la ACB aterriza igualada en Madrid y lo hace marcada por la polémica arbitral con que se resolvió el segundo partido. Carlos Peruga, Benjamín Jiménez y Alberto Sánchez Sixto serán los encargados de dirigir el tercero. Peruga tiene 21 años de experiencia en la ACB y diez como internacional. Jiménez también es internacional, acumula 18 años en la élite y fue uno de los miembros del trío que dirigió la final de Copa de 2019 entre Madrid y Barça y que ganaron los azulgrana en la prórroga.
Sánchez Sixto vive su quinto curso en la Liga Endesa. Todos los focos estarán sobre ellos.
La consigna en el vestuario del Madrid es despreocuparse del trío arbitral después del monumental cabreo en todos los estamentos del club a raíz de la resolución de las jugadas más polémicas del segundo partido. Del manotazo de Davies a Causeur a la falta de Tavares sobre Higgins, el Madrid se sintió claramente perjudicado en el Palau. El equipo está convencido de que con una actuación imparcial estarían a una sola victoria del título... pero toca resetearse.
Las protestas de los jugadores del Madrid tanto en el Palau como posteriormente en las redes sociales han encontrado respuesta en el Barça a través de un canal oficial. El directivo responsable del baloncesto azulgrana, Josep Cubells, está «seguro» de que «se tomarán todas las medidas» para que no vuelvan a producirse «intimidaciones» contra los árbitros en los próximos partidos de la final. Cubells se refiere a las llamativas protestas de Yabusele en el mismo rostro de Pérez Pizarro nada más acabar el segundo capítulo. El alapívot francés se encaró al colegiado, le gritó a escasos centímetros de la cara y Pérez Pizarro tuvo que retroceder para evitar males mayores. «Detectamos que hubo momentos de mucha tensión, que después derivaron en actuaciones de cierta intimidación hacia los árbitros», afirma Cubells en un mensaje difundido por los canales oficiales del club.
El directivo se mostró sorprendido de que estas actitudes no constaran luego en el acta arbitral: «Para nuestra sorpresa, esto no fue trascrito en el acta arbitral. Creemos que los árbitros son fundamentales en el desarrollo de cualquier partido y, aun más, en la final de la Liga Endesa. Creemos y estamos seguros de que se tomarán todas las medidas para que estas intimidaciones no vuelvan a suceder en los próximos partidos».
En el Real Madrid ya se esperaba una actuación arbitral como la de Pérez Pizarro, Calatrava y Castillo. Y especialmente después de que Jasikevicius exigiera más «dureza», «energía» y una «lucha a muerte» para igualar la final. El Madrid ahora busca su primera victoria como local en un Clásico con Jasikevicius en el banquillo azulgrana. Han sido seis los partidos entre los dos grandes en el WiZink Center desde que el técnico báltico llegara al Barça y el Madrid no ha ganado ninguno. Con Peruga, Jiménez y Sánchez Sixto a los mandos la final llega al territorio definitivo.