La Razón (Cataluña)

La plenitud de Curry

► Los Warriors ganan su cuarto anillo en ocho años al imponerse en el sexto partido a los Celtics. El base, merecidísi­mo MVP de las Finales

- Mariano Ruiz Díez. MADRID

Cuatro años después de su último anillo, tras una pandemia y una plaga de lesiones devastador­a, los Warriors vuelven a ser campeones de la NBA. Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Steve Kerr en el banquillo sumaron su cuarto título tras imponerse en el sexto partido de las Finales a los Boston Celtics. Después de dos temporadas fuera de los playoffs, las lesiones pasaron a la historia y los Warriors se rearmaron para volver a ser campeones después de los anillos logrados en 2015, 2017 y 2018. Con el mejor Curry –34 puntos, 7 rebotes y 7 asistencia­s– de su carrera, confirmado con un más que merecido MVP, el equipo de San Francisco logró el séptimo título de su historia.

Si había un apartado que marcaba la vida de los Celtics eran las pérdidas. Cuando sumaban 16 o más, la derrota era casi inevitable (1/7 en playoffs). En los dos primeros cuartos ya acumulaban 12 y acabaron con 23. Por eso el intenso arranque y el buen comienzo de sus dos referentes, los dos Jays, Tatum y Brown, se fue al traste sin remedio. Los Celtics mandaban 14-2 cuando los Warriors se pusieron a jugar. El punto de inflexión fue un triple de Green. El ala-pívot es el alma del equipo de San Francisco. Antes del partido definitivo soltó: «Comparar a LeBron James con estos Celtics es faltar al respeto a LeBron». Se quedó tan a gusto y cuando anotó su primer triple en todas las Finales, los Warriors se desencaden­aron. Cayó otro triple de Curry, el primero en su primer intento después del 0/9 del quinto partido. Y uno más de Poole. La inercia se mantuvo con la aparición de dos piezas clave procedente­s del banquillo de Steve Kerr: Poole y Payton. El parcial seguía abierto y se disparó hasta un salvaje 0-21 (22-37). Nunca en los últimos 50 años se había registrado un parcial de ese calibre en las Finales. Los Warriors anotaban con facilidad y el goteo de pérdidas celtic era incesante.

La mejor defensa de la Liga comprobó en el tercer cuarto la dimensión del ataque de los Warriors. En los primeros seis minutos cayeron media docena de triples más. Green volvió a acertar; Porter, que llevaba unas Finales grises, enchufó un par y Curry... Curry se embolsó el trofeo de MVP, el que le faltaba, con tres triples definitivo­s. Sumó nueve puntos en un suspiro. Después de un triple desde nueve metros, se señaló el dedo anular. Su cuarto anillo estaba consumado. Green comenzó a bailar en el tiempo muerto que solicitó Boston en busca de un milagro. Horford y Brown tiraron de orgullo,peronobast­ó.LosWarrior­s sumaron su cuarto anillo en ocho años. Curry, como no podía ser de otra forma, fue el Jugador Más Valioso. Sus lágrimas de felicidad estaban justificad­ísimas.

 ?? REUTERS ?? Stephen Curry, con un puro en la boca, celebra el anillo de los Warriors y su título de MVP
REUTERS Stephen Curry, con un puro en la boca, celebra el anillo de los Warriors y su título de MVP

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain