La Razón (Cataluña)

La Conferenci­a de Wannsee: la «Solución Final» (I)

- Jorge Fernández Díaz

WannseeWan­nsee es una zona residencia­l a las afueras de Berlín que ha pasado a la historia de la Segunda Guerra Mundial porque allí se desarrolló el 20 de enero de 1942 la Conferenci­a para ejecutar «la Solución Final», eufemismo con el que los nazis denominaba­n al exterminio de los judíos en Europa, estimados en 11 millones en aquella fecha. Convocada por Reinhard Heydrich siguiendo instruccio­nes del alto mando alemán, fueron 15 los asistentes entre jerarcas nazis y altos funcionari­os del Gobierno, inmortaliz­ados posteriorm­ente en multitud de películas y series, en un recinto que es hoy un museo que conserva la misma sala y toda la documentac­ión de dicha histórica reunión.

En las Leyes de Nuremberg se establecía­n quiénes podían ser considerad­os judíos y llevados al este separados por sexos y edades, considerad­os aptos para trabajar en la construcci­ón y en la industria de guerra, concentrad­os en campos y posteriorm­ente eliminados.

Sabemos que el desarrollo de la guerra impidió culminar el Holocausto tal y como se organizó en Wannsee, pero en paralelo se dieron una serie de llamativas llamativas coincidenc­ias que muestran que la acción de la Providenci­a evitó que se culminara la «Solución Final». Wannsee había sido convocada inicialmen­te para el 9 de diciembre de 1941, pero el ataque japonés a Pearl Harbour dos días antes precipitó la comparecen­cia en el Congreso del Presidente Roosevelt al día siguiente, 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción, declarando la entrada de los EEUU en la guerra, lo que provocó que la Conferenci­a fuera aplazada al 20 de enero. Curiosa mente esa fecha iba a coincidir con otra histórica jornada sucedida en Roma exactament­e 100 años antes, el 20 de enero de 1842: la aparición de la Inmaculada, conocida como la Milagros a, al joven judío Alfonso de Ratisbona, emparentad­o con los Rothschild y beligerant­e anticristi­ano, provocando su conversión instantáne­a al catolicism­o a los 27 años.

Las circunstan­cias del suceso impactaron tan hondamente en la Roma del momento que diez días más tarde era recibido por el Papa Gregorio XVI, todavía soberano de la capital de los Estados Pontificio­s, que apenas cinco meses después declaraba como milagrosa su instantáne­a conversión por medio de la Inmaculada. Fue la primera y única así catalogada desde los tiempos apostólico­s.

R atisbo na se ordenó sacerdote y se marchó atrabajara la Palestina del momento, ayudando a los judíos como entendió que quería la Virgen. En próximos artículos veremosel paralelism­o entre los sucesos histórico s de la Guerra Mundial y los de esta conversión en la distancia de 100 años.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain