Badosa, sin límites Mariano Ruiz Díez.
► En su debut en la Central supera a la checa Kvitova para alcanzar por primera vez la segunda semana en Wimbledon
Paula Badosa ya está por primera vez en la segunda semana de Wimbledon. La única superviviente española en el cuadro femenino derrotó en la tercera ronda a Petra Kvitova por 7-5 y 7-6 después de dos horas y cinco minutos en el que era su debut en la Catedral. Su rival en octavos será una clásica, Simone Halep. La rumana, ex número uno del mundo, ya fue campeona en Londres hace tres años y ahora ocupa el número 16 del mundo.
Cerraba Badosa el primer set gracias a una doble falta de Kvitova y la española se llevaba el dedo índice a la cabeza. “Cabeza, cabeza, cabeza, cabeza...”. Jorge García, su entrenador, repetía el gesto de su pupila en el palco. Juan Betancourt, su novio sentado al lado del técnico, también lo hacía. Fue la clave con la que Badosa encarriló el camino a los octavos de final y es la clave que la ha convertido desde hace meses en una aspirante a casi todo. La checa, dos veces campeona en Londres (2011 y 2014), aunque desde 2019 no pisa los cuartos, sumó un break en el arranque del partido y lo conservó hasta el tramo decisivo. Cuando llegó la hora de la verdad, la cabeza de la española resultó determinante. Petra Kvitova sirvió en el décimo juego para llevarse la primera manga, pero fue incapaz de minar la resistencia de Badosa. El break que igualaba el de la checa fue capital para llevarse el primer set.
La solidez mostrada en las dos primeras rondas del torneo encontró continuidad. Cinco juegos cedidos en los dos primeros partidos y una muy notable respuesta al primer desafío serio. Porque la checa no renunció a la pelea. Salvó una bola de break en su primer servicio y dispuso de cinco oportunidades de ruptura en el tercer juego. Badosa salvó todas, pero la checa empezó a mandar con su derecha. Eso suponía perseguir bolas desde el fondo de la pista a derecha e izquierda con desesperación. La resistencia, ayudada con un buen servicio, fue encomiable. De las siete bolas de break que dispuso Kvitova sólo fue capaz de consumar la del comienzo del partido. Badosa se agarró a su servicio; la checa siguió al ataque y la única recompensa que obtuvo fue alcanzar el tie-break. En el terreno en el que la cabeza y el servicio son lo más importante, Badosa se mostró inalcanzable. El saque la permitió empezar mandando por 4-1 y cuando la checa apretó su derecha ya no respondió igual.
La victoria de Badosa supone la excepción que confirma la plaga que afecta a los favoritas en esta edición de Wimbledon. Sólo dos jugadoras del «top 10» han sido capaces de sobrevivir a la primera semana. La tunecina Ons Jabeur, marcha por la parte alta del cuadro, la española, por la parte baja. Sobreviven también dos raquetas que saben lo que es levantar un Grand Slam: Simona Halep, la rival de Badosa en octavos, y Jelena Ostapenko. También hay hueco para algunas novatas destinadas a lo más alto como Elena Rybakina y Amanda Anisimova. El caso es que en Londres ya no hay favoritas.
En octavos a la española la espera otra campeona en Londres, Simona Halep