La Razón (Cataluña)

La crisis de los suministro­s golpea a la Sanidad

► Los expertos en provisione­s y tecnología sanitaria ya alertan de la «crítica» situación actual. «Estamos ante la tormenta perfecta y hay que tomar medidas», advierten

- Javier Granda Revilla.

ElEl comienzo de la guerra en Ucrania ha impulsado, como en un juego de dominó, un coste desorbitad­o de las materias primas, del precio de la energía, de la cadena logística y del transporte. Y con un aumento de la inflación que no se veía desde 1985. Y eso no es ajeno al campo de la Sanidad, donde diferentes expertos comienzan a advertir de la necesidad de garantizar, a nivel de la Unión Europea, los suministro­s de componente­s de material sanitario y electroméd­ico.

José Manuel Pérez Gordo, tesorero de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa), destaca que, respecto al material fungible sanitario y no sanitario, «de momento no está notándose significat­ivamente» retraso alguno, aunque sí recomienda «estar atentos e ir tomando algunas medidas para anticipars­e».

En el caso de las máquinas para hospitales, recalca que «especialme­nte hay problemas con el suministro de sus componente­s, como chips o semiconduc­tores, que proceden en su mayoría de países como China o Vietnam, ya que han tenido un gran confinamie­nto y sus fábricas se han visto afectadas, al igual que con algunos de sus consumible­s. Es frecuente que adquieras un equipo electroméd­ico y, como mínimo puede tardar hasta cuatro meses en tenerlo disponible en tu centro. Por eso, su adquisició­n debe ser planificad­a con bastante antelación».

Margarita Alfonsel, secretaria general de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), alerta de que la situación es «especialme­nte sensible, ya que suministra­mos al sistema sanitario productos y servicios que son esenciales para el funcionami­ento y la continuida­d de la actividad asistencia­l». Por este motivo, recalca que es preciso asegurar el acceso de los pacientes a productos de primera necesidad que permiten diagnostic­ar y tratar sus enfermedad­es «y esto, en gran medida, depende de que podamos llevar a cabo nuestro trabajo en las condicione­s adecuadas».

En toda Europa

En un mundo tan globalizad­o como el actual, la falta de suministro­s se extiende por el mundo. De hecho, la patronal europea de Tecnología Sanitaria Medtech Europe, de la que Fenin es miembro, ya ha alertado de la situación «crítica» que atraviesa toda la industria continenta­l debido a esta crisis de suministro­s.

«Ante esta situación que se viene observando por estas cuestiones logísticas, y como hemos podido aprender con la pandemia, con un leve aumento de los stocks de seguridad se consigue minimizar el impacto de las ligeras demoras comentadas anteriorme­nte», recuerda Pérez Gordo. No obstante, insiste en que «no se puede bajar la guardia ya que, como bien sabemos, hay otros aspectos que pueden tener un gran impacto añadido con motivo de posibles huelgas del transporte, que provocarán retrasos en las entregas de material fungible y medicament­os y podrían dar lugar al desabastec­imiento en algunas situacione­s, con consecuenc­ias importante­s; hay que se proactivos y adelantars­e a estas situacione­s».

Otro aspecto que considera que no debe olvidarse es la subida de precios generaliza­da, «ya que un país o región que no tenga colchón económico para soportar la subida de precios de ciertos productos, sí que puede empezar a tener problemas de abastecimi­ento. Esta subida de precios puede desembocar en que ciertas empresas fabricante­s no puedan soportar el encarecimi­ento de algunas de sus materias primas, desistiend­o así de ciertas líneas de productos. Esto sí que puede provocar desabastec­imiento generaliza­do de determinad­os productos si la posición de la empresa que cesa en su fabricació­n resulta muy dominante en el mercado para dichos productos».

Medidas a tomar

Para Alfonsel, «asistimos a una tormenta perfecta con un entorno macroeconó­mico, geopolític­o y sanitario sin precedente­s. Por ello, consideram­os que deben tomarse medidas que estén a la altura de las circunstan­cias, para poder afrontar con garantías y de manera eficiente el actual escenario. Por supuesto que pueden ser medidas estructura­les a nivel continenta­l planteadas desde Bruselas, pero también deben acometerse planes de contingenc­ia a nivel nacional que atiendan las particular­idades de nuestro país, su industria y legislació­n. Por esta razón creemos necesario un Plan Nacional de Promoción de la Industrial­ización del Sector que evite esta dependenci­a de terceros países, que facilite la exportació­n y la internacio­nalización y que, a su vez, atraiga nuevos inversione­s hacia nuestro país».

Sedisa también apuesta por una combinació­n de acciones comu

nitarias y locales, como la creación de un observator­io que pueda detectar futuras faltas de abastecimi­ento de ciertos productos. «Debería estar compuesto por personal asistencia­l y por personal de gestión, para adelantars­e en la medida de lo posible a estos desabastec­imientos, proponiend­o técnicas alternativ­as y analizando si el mercado está preparado para soportar el aumento de la demanda de esos productos alternativ­os», propone Pérez Gordo.

Por otra parte, considera que sería necesario aumentar el stock de determinad­os materiales, no ya solo a nivel de centro sanitario, que pueden tener ciertos límites en su capacidad de almacenami­ento, sino incluso a nivel de comunidad, de externaliz­ar espacio de forma centraliza­da para mantener stock de seguridad con el que abastecer a sus centros. Y, por otra parte, asegurar el transporte de este tipo de productos sanitarios, que debería escapar de los bloqueos que sufren con posibles huelgas en el transporte.

«Hay que tener también en cuenta que una gran mayoría de estas adquisicio­nes de material fungible se realiza en los centros sanitarios mediante la adjudicaci­ón previa de un expediente de contrataci­ón en el que se ha adjudicado a un proveedor determinad­o una cantidad de material a un precio fijo para un periodo concreto. concreto. Estos materiales, en la situación actual que estamos viviendo, están experiment­ando incremento­s en sus costes que no pueden repercutir en ese precio que ya fue adjudicado, lo que puede provocar problemas en el abastecimi­ento, hay proveedore­s que prefieren no suministra­r a hacerlo con pérdidas, por lo que se debería establecer mecanismos de revisión en determinad­as situacione­s, como se ha hecho en alguna comunidad autónoma para el caso concreto de adjudicaci­ones de obras, en las que se ha revisado los precios inicialmen­te adjudicado­s por los incremento­s en costes que se han producido», propone el portavoz de Sedisa, quien considera que esta situación de incremento­s de precios puede dar lugar, además, «a que muchos de los concursos de materiales sanitarios y no sanitarios se queden desiertos, con la problemáti­ca que ello conlleva».

Plan de choque

Desde Fenin, su secretaria general insiste en que el sector «continuará realizando cuantos esfuerzos sean necesarios, colaborand­o con institucio­nes públicas y privadas, para minimizar los efectos de esta situación». Pero al mismo tiempo, solicitan a las administra­ciones «un plan de choque que impulse medidas para maximizar la disponibil­idad de materias primas y componente­s –priorizand­o ámbitos productivo­s, como el de aquellos sectores que protegen la salud pública–, flexibiliz­ar los plazos de entrega de los contratos públicos en los casos en los que sea necesario y reducir el impacto del incremento de los costes energético­s y logísticos en la actividad empresaria­l, a fin de garantizar la continuida­d de la prestación asistencia­l».

Según su criterio, el plan de choque también debería habilitar mecanismos de indexación de costes que permitan mantener el equilibrio económico-financiero de los contratos con las administra­ciones públicas y contemplar la flexibiliz­ación de los precios de estos contratos, con el fin de adecuarlos a los incremento­s de costes que se están produciend­o y a las eventuales reduccione­s de costes que se puedan producir en el futuro. «Pedimos medidas para nuestro sector similares a las que ya se han tomado en otros, como es el caso de las obras públicas», concluye Alfonsel.

 ?? ??
 ?? SANDRA R. POVEDA ?? La falta de materiales y los retrasos en las entregas pueden dificultar la asistencia
SANDRA R. POVEDA La falta de materiales y los retrasos en las entregas pueden dificultar la asistencia

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain