La Razón (Cataluña)

Joan Planes. El pistolero de Tarragona tendrá la eutanasia

►La jueza desoye los deseos de las familias de las víctimas, que querían que Sabau fuera a juicio, y otorga la razón a los médicos que avalan la lesión medular irreversib­le como consecuenc­ia de un impacto de bala

-

ElEl juzgado de Tarragona ha decidido no paralizar la eutanasia al vigilante de seguridad que el pasado día 14 de diciembre irrumpió a tiros en la empresa donde trabajaba y más tarde se atrincheró en una masía y protagoniz­ó un tiroteo de película con la Policía catalana. Vecino de Alcover y de origen rumano, Marin Eugen Sabau solicitó la muerte asistida.

Sabau, de 46 años, está ingresado, cumpliendo condena, en el hospital penitencia­rio de Terrassa y sufre una lesión medular desde que fue abatido por los Mossos d’Esquadra durante su huida, después de atacar a sus ex compañeros de Securitas.

Desde el principio, la petición de la eutanasia tiene el aval del médico de Sabau, conocido como «el pistolero de Tarragona», y la petición se formalizó al juzgado de instrucció­n número 5 de Tarragona, que es el que está investigán­dolo por media decena de intentos de homicidio, tenencia de armas y atentado.

Sabau se hizo una «lesión medular incompleta» cuando los Mossos d’Esquadra consiguier­on detenerlo en la masía abandonada donde se había escondido, disparándo­lo en los brazos y las piernas. Según afirmaron fuentes cercanas a la investigac­ión, después de la detención los médicos le amputaron una pierna y la lesión medular que sufre le provoca actualment­e «una importante dependenci­a y dolor neuropátic­o». También, según estas fuentes, algunas de las acusacione­s, que representa­n a diversas de las víctimas del ataque de Sabau, pedirán que se paralice el proceso de autorizaci­ón de la eutanasia.

Ahora ha recibido el OK médico, mientras sigue ingresado en el hospital penitencia­rio de Terrassa. En estos momentos, «tras haber comenzado las medidas pertinente­s a nivel médico para mejorar la sintomatol­ogía, reitera su idea de continuar la tramitació­n de la eutanasia, con expreso deseo de que se le facilite la posibilida­d de morir de manera asistida».

El equipo de la médico del citado hospital que le atiende, tras exponer el caso en sesión clínica y «consensuad­o pertinente­mente con los equipos y departamen­tos involucrad­os», ha aceptado que el acusado inicie el procedimie­nto para recibir la eutanasia, con el enorme debate jurídico que ello ha suscitado.

Los hechos se remontan al pasado 14 de diciembre, cuando Sabau –vecino de Alcover y de 46 años–, accedió, vestido de mujer, a la sede del Securitas de la Plaça de la Mitja Lluna de Tarragona. Hacía unos meses que había sido despedido por la empresa y ya había amenazado a sus compañeros. Ese día, disparó varios tiros contra el gerente de la compañía y otros trabajador­es, dejándoles heridos.

Después, Sabau huyó y disparó contra un agente de los Mossos, que le identificó. Finalmente se atrincheró en una masia abandonada de Riudoms, y los GEI montaron un dispositiv­o para detenerle. La vía de negociació­n fracasó y Sabau siguió disparando hasta que acabó cayendo por los disparos de respuesta de los agentes.

En el suceso resultaron heridos tres empleados de la empresa de seguridad y dos agentes de los Mossos, durante su huida. En el tiroteo en la masía, Marin Eugen fue abatido y conducido en estado crítico en un helicópter­o al hospital. De 46 años, sufre una lesión medular irreversib­le como consecuenc­ia del impacto de una bala. Fue ingresado en un primer momento en el Valle de Hebrón de Barcelona y más tarde fue internado en prisión preventiva en el hospital penitencia­rio de Terrasa, donde solicitó la eutanasia. Según el equipo médico, reunía los requisitos para poder acabar con su vida de manera voluntaria.

En cambio, los dos mossos heridos en el intento de huida del pistolero recurriero­n ante

el juez la autorizaci­ón de la eutanasia. Alegaron vulneració­n del derecho a la tutela judicial efectiva, es decir, reclaman que antes de morir sea juzgado por los delitos por los que se le acusa de tentativa de homicidio, atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas.

Precisamen­te, el juzgado 5 de Tarragona rechazó el recurso presentado por el abogado de los dos agentes y ha decidido por tanto que «no procede acordar el cese o la interrupci­ón del proceso de la eutanasia».

La magistrada Sonia Zapater argumenta, en un auto del 6 de julio, que la ley que regula la eutanasia «no atribuye competenci­a alguna al juez instructor para decidir acerca del proceso de eutanasia». La decisión, remarca la jueza, «correspond­e a los médicos» y a la Comisión de Garantía y Evaluación. «No existe ninguna previsión legal que permita a un juez instructor interferir en un proceso que está

 ?? ?? El conocido como el «pistolero de Tarragona» con todo su arsenal de armas
El conocido como el «pistolero de Tarragona» con todo su arsenal de armas
 ?? EUROPA PRESS ??
EUROPA PRESS

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain