La Razón (Cataluña)

Acoger y escuchar a Cristo

Juan José Omella

-

ElEl pasaje del Evangelio según san Lucas que se proclama este domingo nos presenta a dos mujeres entrañable­s: Marta y María. El testimonio de estas dos hermanas nos ayudará a vivir con más autenticid­ad nuestra vida cristiana.

El evangelist­a Lucas explica que Jesús entra en un pueblo y se dirige a casa de Marta y María. María, al ver al Señor, lo deja todo y se pone a sus pies para escucharlo. Marta, en cambio, solo quiere que a Jesús no le falte de nada. Se desvive por él. Tiene tanto trabajo que le pide al Señor que le diga a su hermana que le ayude. Sin embargo, Jesús se dirige a ella con cariño y le dice: «Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una es necesaria. María, pues, ha escogido la parte mejor, y no le será quitada» (Lc 10, 4142).

Marta es una mujer hacendosa y hospitalar­ia. Jesús no le reprocha su laboriosid­ad. Buena prueba de ello es que el fragmento anterior al episodio sobre Marta y María es la parábola del buen samaritano. En ella Jesús nos invita a trabajar intensamen­te por nuestros hermanos, sobre todo por los más vulnerable­s. El consejo de Jesús a Marta va en otra dirección. Jesús, a través de Marta, nos advierte del peligro que todos tenemos de quedar atrapados por nuestras muchas ocupacione­s, por el activismo.

María se queda sentada a los pies de Jesús escuchando su Palabra. En la Biblia ponerse a los pies de alguien significa hacerse su discípulo. Esta es la «parte mejor» a la que se refiere el evangelist­a. María nos enseña que lo más importante para la vida cristiana es estar junto a Jesús y encontrar algún momento para entrar en comunicaci­ón con Él a partir de la Palabra de Dios. Si así lo hacemos, no caeremos en el activismo, no seremos absorbidos por nuestras múltiples tareas. Seremos como la zarza ardiente de la que nos habla el libro del Éxodo. La zarza se quemaba, pero no se consumía (cf. Ex 3,2). Si, como María, nos quedamos junto a Jesús, recibiremo­s la fuerza necesaria para servir a nuestros hermanos y hermanas con amor y alegría.

Marta y María hospedan a Jesús. En casa de estas dos hermanas, Jesús puede descansar de las fatigas de la jornada. Marta y María le ofrecen un hogar donde se siente acogido y escuchado. También hoy Jesús quiere ser nuestro amigo, venir a nuestra casa y vivir con nosotros para siempre. El autor del libro del Apocalipsi­s lo expresa con estas bellas palabras: «Mira, estoy de pie a la puerta y llamo. Si alguien escucha mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo» (Ap 3,20).

Queridos hermanos y hermanas, el testimonio de Marta y María nos anima a acoger a nuestros hermanos y a compartir con ellos la alegría del evangelio. Sepamos encontrar algún momento para estar a solas con Jesús y escuchar con gozo su Palabra.

Para el cantante de ópera, «La fe, la música y su familia han sido pilares fundamenta­les para salir adelante. Las tres cosas que me han sostenido en los momentos difíciles». Plácido asevera que «ante lo más oscuro, confiar en la fe es la única guía». Incidencia pública (del 1 al 10): 9.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain