Engaños y mentiras
SiSi con el nuevo impuesto extraordinario que Sánchez va a imponer a los grandes bancos y grupos energéticos para luchar contra la inflación, los precios de la luz, carburantes y cesta de la compra bajan, creo que Martinez Almeida debiera de denominar nuevas calles en Madrid con los nombres de los presidentes de Repsol, Cepsa, Naturgy, Endesa, BBVA, Santander y CaixaBank.
Van a ser los héroes que nos van a salvar de la crisis económica por cómo lo cuenta la izquierda. No hace falta reducir el gasto público, tampoco el déficit, ni la deuda. La solución está en buscar unos culpables y hacerles pagar por ello. Es lo que la izquierda entiende por justicia social y económica, más interesada en acabar con la riqueza que con la pobreza.
No sólo deberían de tener calles en Madrid, los organismos de nueva creación que va a poner en marcha el Gobierno, deberían de llevar su nombre. La nueva Agencia Espacial Española quizá debiera denominarse Agencia Espacial Torres por el BBVA. El Falcon debería llamarse Imaz por Repsol o el helicóptero Súper Puma denominarse Goirigolzarri por CaixaBank. No veo a la izquierda viajando a NY en un Imaz ni a la ministra de Hacienda pronunciando Goirigolzarri.
Veremos quién acaba pagando el impuesto extraordinario, si las empresas o los usuarios. Pero, mientras tanto el Gobierno eleva en 55 millones el gasto en publicidad institucional previsto para 2022. Se han contratado 13 campañas institucionales de contratación anticipada para el año 2023 con la precampaña electoral a la vuelta de las vacaciones. Una cifra que se suma a los 158,34 millones de euros que ya se aprobaron en febrero de este año y que representaron el mayor gasto en esta partida en 14 años. Quien quiere mentir, engaña, y quien quiere engañar, miente.
«No hace falta reducir el gasto sino buscar unos culpables»