No solo «Hurricane» de Dylan, sino «Walk Like an Egyptian» de las Bangles ha sido censurada
Britney Spears y Adele también han pasado por la misma clase de proceso que Beyoncé
en algunas partes de Estados Unidos por «blasfemia». Impresionante. Luego estuvo «The Pill», de Loretta Lynn (1975), prohibida en muchas emisoras debido a su contenido relacionado con el control de la natalidad. Pero es que hasta el «Imagine» de John Lennon fue censurado en algunas emisoras de corte católico por su frase «imagina que no hay cielo».
Sin duda la canción estrella de este grupo es el «Like a prayer» de Madonna de 1989, que provocó una gran controversia en todo el mundo. La American Family Association y el Vaticano condenaron el video musical por sus imágenes supuestamente blasfemas. Los grupos religiosos también protestaron por la canción después de que se usara en un anuncio de Pepsi, que finalmente decidió cancelar la campaña publicitaria. Mientras tanto, el Papa Juan Pablo II animó a la gente a boicotear los conciertos que la cantante había previsto en Italia en 1990 poco después del lanzamiento de la canción. Por otra parte, Madonna también ha sido prohibida en Egipto y enfrenta restricciones en Rusia. Una artista solo para decir «cherry». Claro, eran otros tiempos.
Algo de comercial (por evitar demandas) tuvo la autocensura de Bob Dylan con su exitosa «Hurricane», la historia inspirada en el caso de un boxeador que encarcelado injustamente de un delito que no cometió. Se publicó en noviembre de 1975 y se terminó de grabar en octubre, pero inicialmente la compuso en junio. Sin embargo, Dylan se tomó algunas «licencias literarias» acusando a los ladrones Alfred Bello y Arthur Dexter –quienes testificaron contra Carter– de haber robado unos cuerpos. Columbia Records, la compañía de Dylan, advirtió al artista de posibles demandas y éste, con buen criterio, se avino a corregir algunas líneas. Incluso así,
Idol o Whitney Houston. Las amenazas legales del primero fueron las que llevaron a MTV a prohibir el video. Eso sí, cambiaron de opinión cuando la canción ya era un éxito a través del canal MuchMusic.
Por ofensas
Un curioso precedente de lo que le ha sucedido ahora mismo a Beyoncé ya lo encontramos en el mítico «My Generation» de The Who de 1965. Fue prohibida en la radio por una razón ajena a su contenido lírico. Resulta que Roger Daltrey hacía ciertos sonidos guturales durante la interpretación y la
BBC,