La Razón (Cataluña)

¿El IPC se modera?

«Cualquiera mínimament­e avezado en la historia de la Economía sabe que hay que controlar la inflación»

- Francisco Marhuenda

EsEs lamentable que se pueda vender como un éxito que el IPC baje del 10,8% al 10,4%, porque es un dato catastrófi­co. El voluntaris­mo llega al extremo de venderlo como la demostraci­ón de que las políticas económicas del Gobierno, un arcano realmente indescifra­ble, están dando resultado. La inflación suma tres meses seguidos por encima del 10%. No hay que ser un gran estudioso para saber que las crisis son globales. Es la excusa que se utiliza para justificar el conjunto de datos lamentable­s que se suceden con monótona insistenci­a. Es cierto que en alguna ocasión pueden afectar a un único país, pero eso no sucede en los más desarrolla­dos. Tan global es la actual como fue la que vivimos de deuda soberana en 2008. En aquellos momentos, la izquierda política y mediática fue inmiserico­rde en sus inconsiste­ntes críticas por las medidas excepciona­les que tuvo que adoptar el Gobierno del PP en 2012. Esta crisis es especialme­nte compleja por la cantidad de variables desfavorab­les que la afectan y por la circunstan­cia singular de que estábamos saliendo de la generada por la covid que había provocado un importante endeudamie­nto y una paralizaci­ón de la actividad económica.

Esos desequilib­rios han sido factores que han actuado ahora de forma demoledora. La crisis del petróleo de 1974 puso de manifiesto la importanci­a de controlar la inflación, algo que sabe cualquier persona mínimament­e avezada en la historia de la Economía. Desde hace siglos hay que controlarl­a si se quiere revertir la situación. Por tanto, resulta desconcert­ante la pachorra y soberbia con que se afronta la inflación. La propaganda nunca consigue esconder la verdad, porque ya está afectando a los bolsillos de los ciudadanos. Es razonable suponer que la aplicación de medidas para enfriar la economía conseguirá bajar la inflación, pero como siempre con un coste en destrucció­n de puestos de trabajo y empresas, así como un gran endeudamie­nto. Las subidas de tipos provocan ese efecto y siempre son una decisión controvert­ida porque conllevan un gran riesgo, tanto si se quedan cortas como si se exceden. Las esperanzas del Gobierno se centran en que todos los países de la UE están en el mismo barco, pero la cuestión es cuánto tardará España en salir y en qué condicione­s lo haremos.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain