El TSJC denuncia el déficit de jueces en Cataluña
► Barrientos califica de «demora inaceptable» la renovación del CGPJ
El alto tribunal cifra en 76 los magistrados que faltan para alcanzar la ratio del resto de España
En su discurso durante la inauguración del año judicial en Cataluña, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús María Barrientos, lamentó, en relación con la actividad judicial en la comunidad autónoma durante 2021, que ha aumentado la congestión de los juzgados, que recibieron más casos que en 2020 y 2021, y resaltó que fue la primera vez en cinco años que se resolvieron más causas de las que se iniciaron.
Destacó la saturación de los juzgados mercantiles y que en 2021 Cataluña concentró el 42% de las ocupaciones ilegales de vivienda en toda España: compartió que la situación le preocupa y deseó que «quien tiene la iniciativa legislativa acierte» en las reformas legales pertinentes.
Insistió en la necesidad de ampliar la plantilla de jueces en Cataluña -- «necesitaríamos incrementar en 76 las plazas judiciales solo para alcanzar la media nacional», y recordó que al cerrar 2021 había un 10% de plazas de jueces y magistrados vacantes a pesar de la entrada de la última promoción de la Escuela Judicial, con 74 jueces nuevos.
En este sentido, aplaudió el programa de becas para opositores a juez y fiscal que ha convocado la conselleria de Justicia: «Tanto su dotación económica como la duración de los programas, de cuatro años, nos parecen una fórmula adecuada de promoción de las dos carreras, y de formación de profesionales que aseguren la permanencia y ejercicio en Cataluña».
Por otra parte, criticó la «injustificable demora» en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que está en funciones desde diciembre de 2018.
Advirtió de que mantener el CGPJ en funciones puede llevar «al cercenamiento parcial de sus competencias constitucionales»”.
Barrientos lamentó las tensiones a las que, según él, está sometida la justicia e hizo referencia al discurso del presidente del Tribunal Supremo (TS) y del CGPJ, Carlos Lesmes, hace dos semanas en el acto de apertura del año judicial estatal: «Como ya se advirtió allí, pueden abocarla a la inoperancia y a minar la confianza que los ciudadanos tienen en ella», insistió en su discurso.
El presidente del TSJC reprochó que el modelo de elección parlamentaria de los vocales del CGPJ y «los indisimulados pactos políticos que han precedido cada proceso de renovación han ignorado sistemáticamente los condicionantes sobre los que el TC asentó la constitucionalidad del modelo».
Considera que el Congreso y el Senado «están desatendiendo su obligación lógica de mantener al poder judicial al margen de la lucha de partidos», y lamentó que esto puede deteriorar la imagen de la judicatura.
Por eso, el presidente del TSJC reclamó en esta inauguración «establecer una separación nítida entre las tensiones políticas que condicionan la renovación del CGPJ y la actividad ordinaria de los juzgados», a los que ha asegurado que no afecta la indisimulada politización, en sus palabras, que envuelve los nombramientos de los vocales del CGPJ.