Meloni negocia a cara de perro con sus socios el nuevo Gobierno
► Salvini podría no repetir como ministro del Interior y dar esa cartera a Hermanos de Italia tras su holgada victoria el 25-S
La resaca electoral en Italia tras la aplastante victoria de Giorgia Meloni en las urnas inaugura un período de transición en el país transalpino donde los protagonistas se preparan para diseñar la hoja de ruta del próximo gobierno. En espera de ser convocada en el Palacio del Quirinal por el presidente de la República, Sergio Mattarella, la líder de Hermanos de Italia ha optado por mantener un perfil bajo mientras, rodeada de su círculo más estrecho, prepara una lista de ministros que evite un enfrentamiento con la Unión Europea sin defraudar a sus bases.
El amplio consenso electoral alcanzado por Hermanos de Italia frente a la Liga y Forza Italia, sus socios en la coalición conservadora, da manos libres a Meloni para la formación del Ejecutivo. Matteo Salvini y Silvio Berlusconi serán «protagonistas» en el futuro gobierno, como recordó el líder de la Liga tras reconocer los malos resultados de su formación, que obtuvo la mitad de los votos de hace cuatro años, pero será ella quien repartirá las cartas.
Complacer a sus socios no será fácil. Matteo Salvini hizo campaña electoral dando por descontado que volvería a ponerse al frente del Ministerio del Interior, después de su paso fugaz durante el gobierno de coalición con el Movimiento Cinco Estrellas entre 2018 y 2019. Un escaparate inmejorable para recuperar parte del consenso perdido, impulsando, una vez más, su política de mano dura contra la inmigración y puertos cerrados a las ONG de rescate en el Mediterráneo. Sin embargo, «Il Capitano» no contaba probablemente con que las urnas le darían la espalda el 25 de septiembre.
El resultado electoral ha roto el equilibrio de poder de la coalición y obligará a rebajar las aspiraciones líder de la Liga. Un «regalo» para Meloni, que podría vetar a Salvini y confiar la cartera de Interior a uno de los suyos. El gobierno «será excelente y compuesto en base al mérito y no por ningún otro razonamiento», declaró Salvini a modo de advertencia. Pero las tensiones en la coalición por las negociaciones serán inevitables.
«El resultado de la Liga no representa un riesgo de inestabilidad para el gobierno, los problemas internos son problemas internos y no se trasladarán al gobierno», defendió ayer el coordinador nacional de Forza Italia, Antonio Tajani, cuyo nombre suena como «ministrable» para ocupar un puesto de alto perfil en el nuevo Ejecutivo italiano gracias a su amplia experiencia internacional, que incluye la presidencia del Parlamento Europeo. A pesar de estar en el ocaso de su carrera política, el partido de Berlusconi ha protagonizado un resultado mejor de lo esperado. «Il Cavaliere» se confirma como indispensable para la estabilidad del futuro gobierno y, además, podrá reivindicarse como garantía de moderación ante la Unión Europea.
La coalición obtuvo una mayoría «clara pero no abrumadora, sobre todo en el Senado», explica el analista político Lorenzo Pregliasco. Meloni y Salvini no podrían gobernar en autonomía ni en la Cámara de los Diputados ni en la Cámara Alta, por lo que la líder de Hermanos de Italia no podrá «ignorar» a Forza Italia. Berlusconi aspira a presidir el Senado, el mayor cargo institucional después de la Presidencia de la República a la que no pudo optar, pero ésta parece una posibilidad cada vez más remota.
La primera preocupación de Me lo ni es la formación de un Ejecutivo fuerte y creíble fuera de Italia para hacer frente a las turbulencias económicas que se avecinan en Europa. «Respetaremos todos los compromisos: lo primero será contrastar la inflación y el aumento de los precios de la energía», dijo Guido Crosetto, mano derecha de la líder de Hermanos de Italia. «Con nosotros las cuentas públicas estaránseguras », subrayó. La prioridad, aseguran desde su entorno, es un gobierno político, pero en el contexto actual, con la guerra en el codel razón de Europa y un posible agravamiento de la crisis energética este invierno, no descartan confiar las carteras más delicadas a nombres técnicos y de prestigio.
La líder de Hermanos de Italia mantuvo el lunes una conversación telefónica con el primer ministro en funciones Mario Draghi, según publicó la agencia ANSA. Los rumores acerca de un cargo en el futuro gobierno del ex presidentedel Banco Central Europeo( B CE) son insistentes desde hace semanas, pero sería un bofetón para quienes premiaron en las urnas al partido ultra derechista por su oposición al Gobierno de unidad nacional encabezado por el economista. En su lugar, el nombre que suena con más fuerza para una cartera económica es el de Fabio Panetta, miembro del comité ejecutivo del BCE, a quien Meloni definió recientemente como una persona de «altísimo nivel».
Medios locales apuntan a que Meloni estaría tratando de convencer a Panetta para que aceptara un ministerio económico, pero estaría encontrando «resistencias» por su parte. El currículum del banquero, que trabajó codo con codo con Draghi en el Banco de Italia, le convierten en uno de los mejores candidatos para garantizar estabilidad ante la Unión Europea en un período de incertidumbre. Bruselas se ha mostrado cauta tras el triunfo de Hermanos de Italia y ha afirmado su disposición a trabajar juntos.