Objetivo: ganar y, sobre todo, no lesionarse
► Los equipos europeos juegan doce partidos desde hoy al 10 de noviembre. El estrés y el cansancio aumentan las lesiones y el Mundial está esperando
CadaCada vez que a Carlo Ancelotti le preguntan por cómo ve esta temporada responde asegurando que no lo sabe, que nunca un entrenador entrenador se ha enfrentado a un año así. Dice que hasta el Mundial todo es, más o menos, como siempre, pero que después, cuando vuelvan los jugadores, más cansados, satisfechos por la victoria o enrabietados por la derrota, ningún entrenador tiene claro cómo va a ir el resto de la temporada ni cómo van a estar física o mentalmente los futbolistas internacionales.
Pero además de la incógnita por lo que puede suceder después del Mundial entrenadores y futbolistas se enfrentan también, en este mes de octubre, a un extraño tramo de temporada: los grandes equipos, los que disputan la Champions, van a disputar en total doce partidos desde este fin de semana hasta el 10 de noviembre, con encuentros entre semana, a veces con apenas tres días de descanso, es un esprint en el que se comprime la competición para que se pueda disputar el Mundial en estas fechas inéditas.
Para casi todos los futbolistas el objetivo principal es, con la temporada regular aun empezando, disputarlo. Para eso tienen que convencer a los seleccionadores, sobre todo los que saben que pueden entrar en las listas, pero despiertan dudas. Y, principalmente, tienen que pasar por este maratón físico sin lesionarse.
Normalmente el Mundial es a final de temporada, cuando la carga de partidos va disminuyendo y cuando lo que se juega es tan importante que apenas permite pensar en mañana. Sin embargo, ahora, casi todo lo que suceda es remontable (menos caer eliminado en la fase de grupos de Champions) y la oportunidad del Mundial está a la vuelta de la esquina. Así que los futbolistas afrontan este mes tan extraño con dos ideas en la cabeza igual de importantes: ganar y no lesionarse. Y quizá la
segunda pueda pesar más que la primera.
Un estudio de lesiones de Howden Group, un corredor de seguros internacional, asegura que las lesiones de los futbolistas durante la temporada pasada aumentaron un 20 por ciento y eso costó unos 550 millones de euros a los clubes. Esa cifra es el resultado de multiplicar el coste por día de un jugador por el número de días que no estuvo disponible por lesión. El informe del año pasado aseguraba que el coste había sido de 472,6 millones. Es decir, aumentan las lesiones y también lo que pierden los clubes por ellas, porque aumenta el número de partidos y se acorta la distancia entre ellos. Hay, por tanto, menos tiempo para el descanso y más estrés para el futbolista. Todo eso se comprime al máximo en este mes de octubre.
Ayer, David Aganzo, presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y del sindicato internacional (FIFPRO), pidió que los jugadores puedan tomar parte a la hora de confeccionar el calendario. «Trabajamos para que se nos respete a la hora de adoptar decisiones. Estoy seguro de que todas las personas quieren que estén siempre al mejor nivel, pero al cuerpo, por ejemplo, le afectan los viajes, con sus cambios horarios, sus cambios de temperatura. Los futbolistas solo queremos participar en todas las decisiones que se tomen y el calendario es un punto más», decía. Puso el ejemplo de los estudios de FIFPRO en los que se demuestra que el madridista Luka Modric, que jugó 24 partidos seguidos sin cinco días de descanso entre ninguno de ellos, o el del barcelonista Pedri, que disputó más de 70 partidos en una sola temporada.
Los futbolistas son los más castigados en un calendario normal y lo son mucho más en este calendario otoñal, en el que todo apunta al Mundial y a las ganas que tienen ellos de disputarlo. Para muchos es su gran oportunidad de jugar un gran torneo internacional, para los más veteranos puede ser la última vez que se presenten a un torneo así. Casi es un deber que teman que una lesión inoportuna puede dejarles sin ir a Catar.