Suiza multa usar burka u ocultar el rostro en público
► Será de 1.000 euros, diez veces menos que lo previsto al principio
Las autoridades suizas multarán con hasta 1.000 francos suizos (1.030 euros) a las personas que lleven burka, velo integral u otras vestimentas que oculten su rostro en público, de acuerdo con una nueva ley federal presentada ayer a raíz de que los suizos aprobaran el año pasado en referéndum esta prohibición.
La multa es, sin embargo, diez veces menor a la propuesta en el anteproyecto de ley, y que algunas voces habían juzgado desproporcionada, según destacó un comunicado el Ministerio de Justicia helvético.
Además, la nueva legislación introduce la posibilidad de recurrir las multas, algo no contemplado en el anteproyecto legal, así como numerosas excepciones: la prohibición no se aplicará a bordo de aviones, en recintos diplomáticos y consulares, o en iglesias y otros lugares de culto. Igualmente, se podrá ocultar el rostro si se requiere por razones «sanitarias, de seguridad, climáticas, por costumbres locales, con fines artísticos, de entretenimiento o publicitarios», aclaró el comunicado de las autoridades judiciales.
Los suizos aprobaron el 7 de marzo de 2021, por un estrecho margen (52 % de los votos), que se prohibiera en lugares públicos el velo integral o el burka, elementos tradicionales de muchas mujeres de la cultura islámica. La decisión popular fue criticada entonces por la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, que consideró que esa prohibición conduciría a una mayor marginación y exclusión de la vida pública para las mujeres musulmanas en el país.
En España, entre los años 2009 y 2011 algunos ayuntamientos españoles, como el de Lérida, llegaron a prohibir el uso de este velo, argumentando cuestiones de seguridad. Incluso el PP aprobó en el Senado una propuesta de ley, para limitar el velo integral y el burka. La propuesta no prosperó al ser rechazada por el Congreso.
El caso de Lérida llegó hasta el Tribunal Supremo, que en su sentencia del 14 de febrero de 2013 zanjó la cuestión: los ayuntamientos no podían limitar el velo integral, pues era una materia que correspondía al Congreso. Además, su uso estaba amparado por la Constitución.
Los expertos coincidieron en que el Supremo fue muy claro al decir que el uso del burka formaba parte de la libertad de la mujer, y sobre todo de su propia libertad religiosa.
El Congreso español rechazó suprimirlo tras una propuesta del PP
Legislación en otros países
En Francia, en agosto de 2019 entró en vigor la prohibición del burka integral en espacios públicos. La norma, en un país donde alrededor del 5% de la población es musulmana, fue ratificada el 26 de julio de 2018 por el Senado y define la prohibición como «parcial», y no «total», porque solo limita el uso de estas prendas en áreas públicas como escuelas, hospitales, transporte público y edificios gubernamentales.
El 23 de julio de 2011 entró en vigor en Bélgica la ley que prohíbe el uso público del velo integral, incluido el burka y el niqab –vestimenta como el burka que solo deja los ojos al descubierto–, lo que convirtió a este país en el segundo de la UE en impedir de manera generalizada la utilización de esas prendas.
El 1 de agosto de 2018 Dinamarca fue el tercer país en el que entró en vigor la prohibición del burka y el niqab en medio de protestas de mujeres musulmanas que consideran que la nueva norma limitaba sus derechos.
A continuación, ocho estados federados alemanes prohíben a las profesoras el uso del hijab y de cualquier otro símbolo religioso o político, pero las alumnas pueden cubrirse la cabeza con éste. Las funcionarias no puede cubrirse totalmente la cabeza con el velo cuando atienden al público.
Más al sur, en Italia, desde 1975 existe una ley que prohíbe llevar la cara y cabeza completamente tapadas en espacios públicos ya sea con velos o con cascos de motos. En 2011, los partidos gubernamentales Pueblo de la Libertad (PDL) y Liga Norte, así como el grupo parlamentario «Iniciativa Responsable» votaron a favor del decreto que prohíbe la utilización del «burka», con penas previstas de hasta un año de cárcel para quien lo lleve en un espacio público y multas de hasta 30.000 euros para quien obligue a otros a llevar esta indumentaria o incluso a salir a la calle con el rostro cubierto.
En sentido contrario, las mujeres de Afganistán deberán cubrir su cuerpo y su rostro con un burka. Los talibanes se hicieron con el poder en agosto del año pasado y, desde entonces, han ido suprimiendo derechos y libertades. Hacía décadas que las mujeres afganas estén obligadas a cubrirse por ley.