El CSIC detalla los puntos calientes para la conservación del suelo
Un trabajo liderado por el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología (IRNAS-CSIC), del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha publicado la primera estimación global de puntos calientes para la conservación de la naturaleza del suelo. Los investigadores han identificado aquellos que deberían tener la máxima prioridad para la conservación de la naturaleza del suelo; estos se encuentran en los trópicos, el norte de Europa y América, y Asia.
El estudio, publicado en la revista «Nature», concluye, además, que la mayor parte de los suelos que mantienen los niveles más altos de biodiversidad y servicios ecosistémicos no cuentan con un nivel de protección adecuado a nivel mundial. Con el fin de evaluar los puntos calientes globales para la conservación de los valores ecológicos del suelo, un equipo internacional de científicos ha incluido más de 10.000 observaciones de biodiversidad (invertebrados, hongos, protistas, bacterias y arqueas) y de indicadores de servicios ecosistémicos en 615 muestras de suelo de todos los continentes.
Los científicos han combinado estas observaciones para evaluar tres dimensiones ecológicas del suelo: la riqueza de especies, la singularidad de estas especies en cada región y los servicios ecosistemas (como la regulación del ciclo del agua o el almacenamiento de carbono). Los datos obtenidos revelan que las diferentes facetas de la conservación del suelo alcanzan su punto máximo en distintos lugares del planeta, lo que hace difícil protegerlos a todos de forma simultánea. Los ecosistemas templados, por ejemplo, muestran una mayor biodiversidad local del suelo, mientras que los ecosistemas más fríos se identifican como focos de servicios ecosistémicos del suelo.