La lógica de la competición y la convivencia

¿Meloni buscará como aliados en la UE a Orban y Kaczynski u optará por una posición más pragmática?

En principio, todo indica que Meloni será pragmática, si bien puede alternar el pragmatismo con cierto discurso de ambigüedad para no defraudar a una parte de su electorado. Su partido ha sido depositario de una mayoría del voto de centro derecha que históricamente nunca ha buscado una relación conflictiva con la UE. Por lo demás, Italia ya ha tenido un Gobierno Liga-M5S, mucho más radical en sus postulados contra la UE, sin que ello haya tenido consecuencias para la colocación internacional del país.

¿Las diferencias programáticas en la coalición de derechas aflorarán en el gobierno?

Las coaliciones de la derecha italiana de la Segunda República siempre han operado con una lógica de colaboración y competición. Y la convivencia nunca ha sido sencilla. En este punto, la clave estará en cómo se acomoda la Liga, una de las grandes derrotadas de estas elecciones, a una posición de subalternidad frente a Hermanos de Italia.

¿A qué atribuye el éxito electoral de Meloni?

Hay dos claves que permiten entender su ascenso. El primero, desde 2013 los italianos premian a los partidos que expresan una posición crítica con el Gobierno. Más aún con los Gobiernos técnicos alineados con las políticas económicas de la UE. El segundo, Meloni se ha hecho la depositaria de un voto que tradicionalmente ha votado a Forza Italia y a la Liga. En ese sentido, lo que se ha presenciado es un cambio en el liderazgo del centro derecha, mientras que el flujo de voto a la coalición se ha mantenido estable.