Claves de la cirrosis
SeSe estima que en Europa el alcohol está detrás de más de un seis por ciento de las muertes. Una de las enfermedades relacionadas con el alto consumo de alcohol es la cirrosis, una patología que se cobra la vida de 800.000 personas en el mundo. Se trata de una enfermedad que afecta en España a entre el uno y el dos por ciento de la población, y resulta más frecuente en varones mayores de 50 años.
La cirrosis como tal carece de tratamiento médico específico, dado que resulta irreversible. Por este motivo, llevar un estilo de vida saludable es clave para convivir con ella y la dieta resulta fundamental para controlarla. Cinfa recoge un decálogo de la Asociación Española de Enfermería de Patología Digestiva con recomendaciones que se pueden seguir. La primera es comer más a menudo pero en menores cantidades, entre cinco y seis ingestas, evitando los periodos de ayuno prolongado. Además, la alimentación debe ser variada aumentando la fibra y siempre masticando bien. La hidratación también resulta fundamental, sobre todo de agua y excluyendo totalmente el alcohol. Asimismo, es importante tener regularidad en las deposiciones, yendo al baño al menos una vez al día.
Y, por otra parte, hay que vigilar la orina, es decir, tanto su aspecto, como su cantidad y su frecuencia. Sin olvidarnos de cuidar la piel, hidratándola con crema y controlar el picor de la misma.
Las caídas pueden descompensar la enfermedad y aumentar el riesgo de ingreso hospitalario, por lo que hay que evitarlas. Y cómo no, se debe practicar ejercicio físico adaptado a las necesidades de cada persona.
Todas estas recomendaciones son útiles en la cirrosis pero no hay que olvidar continuar realizando las actividades que nos gustan, pedir ayuda en los más allegados y buscar consejo profesional. Seguro.