De infección, embarazo y autismo
EnEn el trinomio infección-embarazo-riesgo del trastorno del espectro autista se ha producido un avance, que protagonizan investigadores suecos, autores de un estudio que aparece en «Lancet Psychiatry». En él, analizaron datos de más de medio millón de niños que nacieron entre 1987 y 2010.
En trabajos anteriores se había demostrado la existencia de un vínculo entre las infecciones en la futura madre durante el embarazo y un mayor riesgo en el niño de enfermedades del desarrollo neurológico, como el trastorno del espectro autista o discapacidad intelectual. Pero no podían asegurar que la exposición de la embarazada a la infección era realmente la causa, o si hay otros factores detrás de este vínculo.
Ahora, en el Instituto Karolinska, si bien pudieron ver que las infecciones que requerían atención especializada durante el embarazo estaban relacionadas con un mayor riesgo de autismo y discapacidad intelectual en los niños, pero cuando estudiaron a los hermanos, el resultado fue diferente. En las comparaciones entre pares de hermanos donde la madre había tenido una infección durante un embarazo, pero no en el otro, no pudieron encontrar ningún vínculo entre la infección y el riesgo de autismo en los niños.
Los investigadores también examinaron el riesgo de trastorno del espectro autista y discapacidad intelectual en los niños si a su madre se le había diagnosticado una infección durante el año anterior al embarazo. Comprobaron que las infecciones en ese periodo estaban relacionadas con el riesgo de autismo en el mismo grado que las registradas en el embarazo, pero no relacionadas con el riesgo de discapacidad intelectual.