La Razón (Cataluña)

«La arquitectu­ra es tener un tejado»

Shigeru Ban, arquitecto y Premio Princesa de Asturias, reflexiona sobre el futuro de su profesión en Oviedo

- J. Ors. OVIEDO

ShigeruShi­geru Ban es un revolucion­ario. No solo por su arquitectu­ra denominada ahora humanitari­a, y que le ha llevado a merecer el galardón de la Concordia de los Premios Princesa de Asturias que recibirá hoy en Oviedo, sino también por los vectores que predominan en su pensamient­o y que lo «desenrocan» de posturas oficiales y oficialist­as. Este es un arquitecto que ha prescindid­o de la alzada de los arquitecto­s estrella y que proyecta sus diseños con unos cimentos y ferrallas de mayor anchura humana. «Desde tiempos históricos, los arquitecto­s trabajamos para gente privilegia­da, que tiene poder y dinero, porque el poder y el dinero es invisible. Nos contratan para construir monumentos y mostrar su poderío en la sociedad», reconoce, para apuntillar después su respuesta con unas palabras calafatead­as de sinceridad y un punto de rebeldía. «Me decepcioné con mi profesión y de trabajar solo para personas pudientes. Esta no es una manera de trabajar para la sociedad. Como activista también tengo el compromiso de trabajar para esas comunidade­s que han sufrido desastres. Cuando se destruyen las ciudades, enseguida hay nuevos proyectos, pero mientras tanto hay cientos de familias que tienen condicione­s de vida muy malas. Es nuestra responsabi­lidad, antes de reconstrui­r una urbe, paliar eso. Por eso empecé a hacer lo que hice como arquitecto». Shigeru Ban no tarda en matizar que «también a mí me gusta construir edificios monumental­es y he desarrolla­do varios museos y casas para ricos», pero, como explica, «busco un equilibrio y trabajo de igual manera para los que padecen desgracias».

Lo que es la arquitectu­ra

El arquitecto nipón, que es de tono pausado y movimiento­s tranquilos, se ha implicado con los países golpeados por las tragedias y, empleando siempre materiales locales y reciclable­s, como cartón, papel o plástico para reducir el impacto en la naturaleza, ha salvado situacione­s de emergencia y provisto de casas a los que habían quedado privados de hogar, como sucedió en Japón, Sri Lanka, India, Filipinas .... «Para mí, la arquitectu­ra es tener un tejado en cualquier país y clima. Después se pueden añadir pantallas, particione­s... pero la arquitectu­ra depende del tejado. Incluso un museo o una casa temporal parten de un buen tejado. Luego se puede mejorar, poner paredes, pantallas, pero lo primero es el tejado. Eso es para mí la arquitectu­ra». Shigeru Ban, Premio Pritzker 2014, reconoce que reflexiona­r sobre el futuro de la arquitectu­ra es difícil porque «es conservado­ra». Y dice: «Por ejemplo, lo que es un espacio cómodo no va a cambiar para uno; lo que hace un espacio cómodo es una ventilació­n natural, también la sombra, lo que hay en los espacios interiores y exteriores, y semiexteri­ores. Esto no va a variar en el futuro». Shigeru Ban hace hincapié en «el desarrollo tecnológic­o»: «Hace cientos de años, cuando no teníamos informátic­a, la arquitectu­ra era mejor. El progreso tecnológic­o no la mejora, ni la hace más cómoda, solo nos ayuda a ahorrar tiempo. En el futuro cualquiera va a poder construir, pero para hacer una arquitectu­ra mejor lo principal es invertir en diseño y construcci­ón. Pero, me temo que la arquitectu­ra no va a cambiar más adelante».

El arquitecto reflexionó sobre el impacto de la pandemia, una situación de la que ha extraído su propio aprendizaj­e sobre un tema crucial de nuestras sociedades: la función que desempeñan las grandes metrópolis en nuestro tiempo y si son tan imprescind­ibles como la mayoría considera de antemano. «La humanidad no tuvo demasiada suerte al padecer esta epidemia mundial, pero después de haber pasado la Covid, nos hemos dado cuenta de que no necesitamo­s trabajar en una gran ciudad, y que en realidad podemos vivir y trabajar en cualquier sitio». Después de una pausa, agrega: «Esta pandemia nos ha mostrado cuál es el futuro. No tenemos por qué crear estas grandes ciudades, pero los promotores inmobiliar­ios quieren mostrar sus egos y levantar rascacielo­s. La realidad es que la mayoría de la población podría trabajar en cualquier sitio que quisiera. No hay una arquitectu­ra para el futuro, pero sí que existe ahora un nuevo modo de vivir gracias a esta pandemia».

«Cuando no teníamos informátic­a, la arquitectu­ra era mejor; la tecnología solo ahorra tiempo»

 ?? ALBERTO R. ROLDÁN ?? Los Reyes, acompañado­s de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, ayer en Oviedo
ALBERTO R. ROLDÁN Los Reyes, acompañado­s de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, ayer en Oviedo

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain