Colau acelera la comisaría del Raval para capear las quejas
► Las nuevas instalaciones de la Guardia Urbana en Ciutat Vella entrarán en funcionamiento durante los próximos días
DentroDentro de dos semanas entrará en funcionamiento la nueva comisaría de la Guardia Urbana de Ciutat Vella, ubicada en el número 4 de la calle de les Tàpies, en el barrio del Raval. Se encuentra justo donde estaba la antigua sede del Consejo Comarcal del Barcelonès. Este martes la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, visitó ayer las instalaciones policiales y destacó que no es casual que la nueva comisaría de la Guardia Urbana esté en el núcleo de Ciutat Vella.
Con esta nueva comisaría, el casco antiguo contará con tres comisarías: la de la calle Tàpies, la de las Rambles y la del paseo Joan de Borbó, compartida con la de los Mossos d’Esquadra.
El edificio, de 2.300 metros cuadrados, se distribuye en cinco plantas más la planta baja y el sotáno: en la planta baja se encuentra la recepción y dos salas de reuniones; la primera y segunda planta se destinará a funciones administrativas y armero, mientras que en la tercera y en la cuarta estarán los vestuarios y, en la quinta, oficinas.
El Ayuntamiento ha invertido más de 1,2 millones de euros en reformar el edificio, que hasta ahora acogía las oficinas del antiguo Consell Comarcal del Barcelonès, para adecuarlo a los usos policiales. De hecho, el equipamiento se ubica en el Raval: «Hay aquí mucha vida en positivo pero eso también atrae hurtos y otros hechos delictivos. Por eso se ha reforzado la plantilla de la Urbana y se abre una nueva comisaría», destacó Colau. El concejal del distrito, Jordi Rabassa, también quiso subrayar el trabajo realizado: «Ciutat Vella es un distrito seguro», sentenció.
Uno de los conflictos concretos de Ciutat Vella, especialmente el Raval, es el narcotráfico. En este sentido, Rabassa pidió a los Mossos d’Esquadra, encargados de la investigación, una unidad específica que trabaje exclusivamente para combatir el problema: «Vamos cerrando, cerrando y cerrando puntos de venta de droga, pero se van abriendo, abriendo y abriendo nuevos. Pedimos un salto para descabezar también las redes de distribución», solicitó el concejal del distrito.
Por su parte, Colau recordó que se ha incrementado un 20 por ciento la presencia de la Guardia Urbana en el barrio: «No nos resignamos que el narcotráfico se instale en Ciutat Vella ni en ninguna parte de Barcelona», apuntó. La alcaldesa destacó que, pese a la percepción de inseguridad, la capital catalana ha registrado una bajada del 22% de los hechos delictivos respecto a 2019, y, de heque cho, es la única de las cuatro grandes ciudades españolas en las que han disminuido los delitos. Con la apertura de la comisaría del Raval, el distrito de Ciutat Vella contará con 437 agentes, aunque la comisaría dispone de capacidad para acoger un máximo de 450, un hecho que Colau recalcó y aseguró «no se puede dudar del compromiso» del gobierno municipal con la seguridad.
El objetivo de esta comisaría de la Guardia Urbana en Ciutat Vella es mejorar la seguridad en el distrito y, más concretamente, en el barrio del Raval. Su función no es sustituir a la antigua comisaría, sino que «se suma». De hecho, el nuevo edificio permitirá ampliar el número de agentes que trabajan en el distrito. Con esta ya son tres las comisarías que hay en Ciutat Vella.
Por tanto, ¿qué pasará con la comisaría del número 43 de la Rambla? Tal y como confirmó Jaume Collboni, las instalaciones seguirán en funcionamiento, pero «como un centro de atención a las víctimas de delitos», con especial atención a la violencia machista ya las investigaciones contra narcopisos, proxenetismo y delitos contra el patrimonio.
El Ayuntamiento subraya que han registrado un descenso de los delitos del 22%