Más de 570 millones para promover el progreso social
► Los programas de microfinanzas y emprendimiento de Santander ayudaron a un millón de personas en 2021
Los programas de Santander Microfinanzas son parte del conjunto de medidas e iniciativas de inclusión financiera desarrolladas por la entidad, como parte de su estrategia de Banca Responsable. En concreto, en el año 2021 se movilizaron un total de 571 millones de euros, gracias a los cuales se ha ayudado a un millón de personas a desarrollar sus negocios, especialmente a emprendedoras con rentas bajas y escasamente bancarizados. Sobre todo, estos programas se han visto más aplicados en países de Latinoamérica, donde las mujeres (que suponen el 72% de los destinatarios de este apoyo) tienen una mayor dificultad para acceder a este tipo de servicios.
El objetivo principal de la entidad en estos países es promover el progreso social ayudando a estos emprendedores a iniciar y hacer crecer sus negocios, a sus familias y a las comunidades donde se desarrollan. En concreto, Santander tiene implantados programas de microfinanzas en ocho países, dentro de los que opera esta entidad: México, Argentina, El Salvador, Brasil, Uruguay, Colombia Perú y Chile.
Para ilustrar este tipo de ayudas tomamos como ejemplo a Luz Mary, una mujer colombiana propietaria propietaria de un terreno. Gracias a este programa, Luz Mary tuvo la oportunidad de desarrollar una pequeña explotación ganadera.
Pero no es la única. Virginia Álvarez, residente de Valle de Chalco, en México, es otra de las beneficiarias del proyecto de Santander Microfinanzas, gracias al cual pudo desarrollar un negocio de fabricación de mascarillas que le ha permitido superar las dificultades financieras derivadas de la pandemia, además de haber creado un servicio esencial para los vecinos de su ciudad, proporcionándoles material para sobrellevar las restricciones impuestas por las autoridades sanitarias.
Servicios completos
Estos programas incluyen, entre otros, productos como microcréditos a medida, que ayudan a microemprendedores a cubrir sus necesidades de capital circulante, productos de ahorro, cuentas corrientes, tarjetas o microseguros. Además, se benefician de una solución híbrida, presencial y online, sin papel de por medio, con desembolsos en menos de 24 horas y el apoyo de agentes, lo que ayuda a mejorar la experiencia y el proyecto del beneficiario.
El objetivo de esta iniciativa no es otro que el de construir una sociedad más inclusiva y empoderar financieramente a las personas.
Estas medidas, además de formar parte del conjunto de iniciativas de Banca Responsable de Santander, antes mencionado, están directamente alineadas con el compromiso adquirido por la entidad de contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible fijados por la Organización de Naciones Unidas en 2015.
Otros objetivos
Dentro de esta estrategia global, Santander tiene fijado otro amplio conjunto de objetivos encaminados a la consecución de un lugar de trabajo inclusivo, diverso e igualitario.
La estrategia de Banca Responsable de Santander está alineada con los ODS de Naciones Unidas
El 72% de los emprendedores beneficiados son mujeres, sobre todo de Latinoamérica
Para ello, la entidad cuenta con el Plan Estratégico en Materia de Diversidad, Equidad e Inclusión, del que derivan diversos programas que buscan promover eficaz y realmente la conciliación, la contratación, el desarrollo profesional, la igualdad salarial y generar concienciación entre los profesionales de distintos sectores.
Además, Santander cuenta con diferentes iniciativas para la inclusión de otros colectivos, como las minorías étnicas. Asimismo, la entidad forma parte de otros proyectos como el programa de igualdad de género desarrollado en el Pacto Mundial de las Naciones Unidas.
Gracias a este compromiso, el Índice de Igualdad de Género de Bloomberg global de 2022 Gender-Equality Index, GEI) ha concedido a Santander la mayor puntuación del sector financiero y la segunda nota más alta entre las empresas analizadas, 418 en total.
Santander contribuye así a la creación de un mundo futuro más igualitario, no solo en materia de género, sino también dentro del marco laboral y económico de millones de personas, a las que habilita una puerta de acceso a una oportunidad y a los recursos necesarios para que emprendedores puedan poner en marcha y desarrollar sus negocios y proyectos de vida.