De Luis Padrique a Amunike
► Luis Enrique debuta en «Twitch» en el «peor día» de su carrera como seleccionador
El Twitch de Luis Enrique sirve igual para enviar su cariño a un jugador que abandona la concentración de España –«es lo más duro de ser seleccionador», dice– que para mandar recuerdos a Amunike o hacer recomendaciones sobre dietética cuando le preguntan por lo que acaba de cenar.
«Hoy ha sido el peor día como seleccionador porque le he tenido que decir a un jugador que abandone la concentración. No es una lesión grave, pero en un Mundial, por la inmediatez, provoca muchos riesgos», explica sobre la marcha de Gayà.
El seleccionador muestra su cara más amable y se muestra feliz cuando sus seguidores se refieren a él como «Luis Padrique». «Me encanta, me gusta mucho», dice. « Increíble abrir el móvil y verlo lleno de corazones». El asturiano muestra su cara más amable incluso cuando le preguntan si Amunike es su hijo, dando la vuelta al famoso grito de «Luis Enrique, tu padre es Amunike». «Gran compañero y amigo. Lo recuerdo, lo tengo muy presente y encantado de que me lo recuerdes», afirma.
Reconoce el seleccionador que comenzó como una broma, pero fueron más de 150.000 personas las que llegaron a conectarse a la vez para ver al seleccionador en directo. Equipado para la ocasión, lejos de la oscuridad del vídeo en que anunció su versión de «streamer» y con la indumentaria perfecta, una camiseta de «Naranjito» personalizada con el número 21. Su número.
Elogió a David Villa el seleccionador, por los goles y por el paisanaje, y reconoció que sería el jugador que le gustaría fichar de la selección campeona del mundo en 2010. «Pero para jugar con Morata», aclara.
Asegura también que le gustaría que, si no lo ganara España, fuera Argentina la que se llevara el Mundial. «Me gustaría que lo ganara un jugador como Messi en su quinto Mundial. Pero si no es en el quinto será en el sexto», explicaba.
Y sobre la promesa que haría si España gana el Mundial, descarta hacer un Ironman. «Eso está chupado, ya he hecho tres», asegura. Y tampoco raparse la cabeza. «Lo he hecho muchas veces y a mi mujer no le gusta». Podría pintarse el pelo de colores, pero sobre todo lo que quiere es «la segunda estrella».