¿Dónde cabe tanto argentino?
ParaPara saber dónde hay un Mundial de fútbol solo hay que seguir la línea albiceleste que marcan las camisetas de los aficionados argentinos. Incluso en este Mundial de Qatar, que es el más artificial que se recuerda. Los mueve la ilusión de ver el Mundial de Messi, aunque se hayan estampado a la primera.
Los aficionados qataríes abandonaron el partido inaugural cuando fueron conscientes de que la victoria de Ecuador era bastante más que una intuición. No se han comprado una Copa del Mundo para ver perder a su selección a la primera. En el segundo día del campeonato se abrieron las puertas de otros estadios para que el mayor espectáculo futbolístico no ofreciera una imagen lamentable de desinterés y abandono.
Eso no le pasa a Argentina. Es complicado ver a aficionados de selecciones que no sean la local, aunque te puedas cruzar con banderas marroquíes o tunecinas. Pero argentinos hay en cualquier lugar. Si vas al Zoco, ves camisetas argentinas y pelucas maradonianas. Si sales del centro, puedes encontrar algún coche con bufandas de Argentina y familias que van a cenar con distintivos de su selección.
Son pocas las aficiones que se dejan ver. Hubo galeses y se espera a brasileños y a mexicanos. Se habla de una cantidad de aficionados de la tricolor capaz de llenar un par de estadios qataríes. El viaje no es barato ni cómodo y no hay tanta gente que pueda permitírselo. Tampoco las fechas ayudan porque no se juega en periodo vacacional.
El Mundial llega a destiempo para los futbolistas y para los aficionados. Pero Argentina es diferente. Dicen que en cualquier lugar te encuentras un gallego, pero cuando llegó el primer gallego ya le estaba esperando un argentino.