Podemos quiere que Yolanda Díaz concrete ya su «partido»
► La guerra se va fraguando: los morados abren la puerta a ir por separado si no son fundamentales
La incertidumbre en la izquierda sigue alargándose en el tiempo y cada vez con más incógnitas y menos visos de una resolución que pase por la unidad.
De cara a las próximas elecciones generales, las alianzas en este espacio son todavía una entelequia. Es decir, no hay nada concreto. Hasta hace pocos meses, en Podemos, principal partido en la izquierda, tenían claro que Yolanda Díaz sería su candidata, al calificarla como la «mejor candidata posible». Ahora, estas proposiciones proposiciones se rebajan al no conocer todavía los planes de la vicepresidenta, es decir, si se presentará o no en las urnas y si Podemos será la «nave nodriza» de Sumar.
De cómo se encuentran en la actualidad las relaciones entre Podemos y Sumar, los dirigentes morados comienzan a dar una fotografía clara que apunta al cisma. La ministra de Igualdad, Irene Montero, fue quien ayer en una entrevista en TVE explicitó la situación: «Aún creemos que es posible un acuerdo de coalición con Sumar, y en ello vamos a estar cuando Yolanda termine de montar su partido». Una afirmación que denota claramente cómo, en Podemos, trabajan ya con el escenario de la unidad pero también con el de la competición entre proyectos similares: llegar a un acuerdo de coalición con Sumar, pero también la posibilidad de que no llegue ese acuerdo.
En el partido repiten la misma idea, que «aún» están a tiempo de llegar a un pacto con Díaz, pero, subrayan la necesidad de que ésta concrete su «partido», un calificativo que no gusta a los de Yolanda Díaz, que rehúsan hablar de esta fórmula, sino de un «movimiento ciudadano» que trasciende los partidos políticos.
Así en la sede del partido se palpa ya la desesperación ante la «indefinición» del futuro político de la vicepresidenta y del «acuerdo de coalición» al que esperan llegar los morados. Es por eso que, cuando se les pregunta sobre por qué todavía hay dificultades con Sumar apuntan directamente a la responsabilidad de Díaz, y apuntan a la tardanza en resolver esta ecuación: «Lo que falta es que Díaz no ha organizado su partido. Una vez que lo organice nos sentaremos a escucharla y creemos que hay tiempo para una coalición con Sumar», afirmó el coportavoz estatal del partido morado, Pablo Fernández, en rueda de prensa tras la ejecutiva semanal.
Para el partido morado «todavía es posible» esta unidad entre Podemos y Díaz, pero para ello primero debe «organizar» Díaz Sumar, para después «escuchar» la propuesta de la vicepresidenta y negociar sobre ello. En Podemos se repite la idea de que el partido «siempre ha apostado por la unidad» y que lo seguirá haciendo. «Siempre hemos sido el partido que más ha tejido por articular espacios plurales y diversos, y seguimos en esa senda; lo que falta es que Yolanda Díaz todavía no ha terminado de organizar su partido, cuando finalice nos sentaremos a escucharla y estamos a tiempo de poder llegar a una coalición con Sumar», repitió el portavoz.
En el partido se refleja un cambio de posición respecto a la futura alianza electoral, pues al reconocer que «aún hay tiempo» para llegar a este escenario, se deja la puerta abierta también a que esta posibilidad no llegue en su momento, y que Podemos y Díaz puedan acudir por separado a las urnas. Dirigentes del partido ya habían rebajado previamente el entusiasmo de la candidatura de Díaz, asegurando que es ella quien debe «decidir si quiere ser candidata». Es decir, pasando la pelota de la responsabilidad a la vicepresidenta.
No obstante, es un escenario que el partido prefiere no ahondar en público, y mantienen la mano a la vicepresidenta, pero la piden que acelere sus tiempos. Y es que en el espacio confederal se habla de la indefinición del proyecto de Díaz, al no conocer todavía su hoja de ruta. Es por eso que fuentes de la confluencia remarcan esa necesidad de concreción. El proceso de escucha de la vicepresidenta se vio parado en varias ocasiones, a causa de la guerra en Ucrania y sus consecuencias económicas y Díaz va exportando sumar a todas las comunidades, con actos casi semanales. Pero para los morados, el plazo que se prevé de culminación del proyecto de escucha, –el mes de febrero– inquieta, debido a la futura negociación y posibles fricciones para llegar a acuerdos de unidad. Además, los morados quieren concursar en Sumar de manera equivalente, con la misma fuerza.
Fue en la «uni de Otoño» de Podemos, donde el partido hizo un repliegue interno y cambió su estrategia para presionar a la vicepresidenta. «Podemos debe ser respetado», fue el clamor por parte del exlíder Pablo Iglesias y el cofundador del partido Juan Carlos Monedero, con el fin de ser «actor determinante» en Sumar.