Sunak aboga por un «pragmatismo sólido» frente al desafío chino
► El «premier» británico defiende dialogar con un actor clave en la economía global
Rishi Sunak apostó ayer por un «enfoque evolutivo» respecto a Rusia y China a largo plazo, por lo que Reino Unido debe hacer lo mismo a la hora de establecer su posición en el tablero mundial. «Esto significa ser más fuertes en la defensa de nuestros valores y la apertura de la que depende nuestra prosperidad. Significa generar una economía más fuerte en casa, porque es la base de nuestra fortaleza en el extranjero. Y significa hacer frente a nuestros competidores, no con gran retórica, sino con un pragmatismo sólido», matizó en su primer gran discurso sobre política exterior.
En definitiva, a diferencia de su antecesora, la fugaz Liz Truss, que marcaba distancias con Pekín, el nuevo líder «tory» considera al gigante asiático como un actor clave de la economía mundial, por lo que cree que la nueva «Global Britain» debe abrir un diálogo, sobre todo ahora que está en búsqueda de nuevos mercados tras salir de la UE.
La cena de gala que ofrece anualmente la máxima autoridad del distrito financiero siempre ha sido una de la citas más destacadas del calendario de Westminster, sobre todo en el contexto geopolítico actual. Y anoche había gran expectación por escuchar al nuevo inquilino del Número 10.
A diferencia de Boris Johnson y Truss, que fueron titulares de Exteriores antes de convertirse en primeros ministros, Sunak anteriormente estuvo al frente del Tesoro y sus críticos creen que carece de visión en política exterior. Pero sus ideas son claras: solo con una economía robusta, Reino Unido puede fortalecer su posición estratégica.
China representa un gran desafío. La reunión prevista con Xi Jingping, en la cumbre del G-20 en Indonesia, fue cancelada en el último minuto tras la explosión de un misil en Polonia. Pero
Sus críticos consideran que el líder «tory» carece de una visión firme en política exterior
cuando los periodistas preguntaron al «premier» cómo veía al gigante asiático, este respondió: «Representa inequívocamente una amenaza sistémica, bueno, un desafío sistémico, para nuestros valores y nuestros intereses, y es sin duda la mayor amenaza estatal a nuestra seguridad económica». Al mismo tiempo, matizó que era un actor clave «indiscutible de la economía global», sin quien no se pueden «resolver los desafíos globales como el cambio climático o la salud pública».