Junts, CUP y comunes ningunean el referéndum pactado de Aragonès
Los posconvergentes consideran una «vergüenza» este planteamiento del presidente
ElEl presidente de la Generalitat en funciones y candidato de Esquerra Republicana a las elecciones catalanas del próximo 12 de mayo, Pere Aragonès, presentó el pasado martes en Barcelona la propuesta jurídica que trasladará al Gobierno de Pedro Sánchez para negociar el encaje del referéndum de autodeterminación en la Constitución, que pasa por la cesión competencial del artículo 92.
Este proyecto no únicamente ha recibido críticas del resto de partidos por su propio contenido pese a que el Partido Popular, Ciutadans y Vox consideran que la segregación de un territorio del resto de España no cabe en la Carta Magna, como la propia norma indica en su artículo preliminar considerando la unidad del país «indisoluble». También trasciende el desprecio a la misma a quienes consideran que las formas, tras convocar elecciones anticipadas y haciendo uso de las instituciones públicas en precampaña, son inoportunas y «electoralistas». Por este segundo motivo, el PP anunció, también el pasado martes, una denuncia contra el actual ejecutivo ante la Junta Electoral Provincial de Barcelona, acusando de un uso partidista de la Generalitat a quienes la gobiernan.
Algunos destacados dirigentes del propio espacio independenla tista arremetieron ayer contra el presidente de la Generalitat en funciones por el contenido de la propuesta y por su actitud para con un referéndum que, y todos convergen en ello, no ha mencionado apenas durante el mandato. Por parte de Junts, fue el diputado Francesc de Dalmases quien expuso en la red social X que esta «ocurrencia» de Aragonès se trataba de una «vergüenza», en relación a su forma de informar sobre el artículo 92 de la Constitución como vía de escape legal «como si se tratara de una gran novedad». «Lo que anunció ayer el presidente es exactamente lo que se acreditó en el Pacto Nacional del Referéndum de 2017», explica el parlamentario posconvergente. Dalmases, muy próximo a la presidenta de la formación Laura Borràs, recuerda asimismo que el actual consejero de Interior en funciones, Joan Ignasi Elena, formaba parte de este pacto y, además, era el portavoz.
«La cuestión no es si la legislación española está preparada para un referéndum de independencia, la cuestión es que ningún Gobierno español accederá si no es por la fuerza», matizó el diputado de Junts, que finalmente reprochó a ERC no haber sido capaz de forzar el referéndum «cuando era decisiva en Madrid». Los posconvergentes, no obstante, apuntan que esta vía para conseguir un referéndum pactado con el Estado podría ser factible si Sánchez lo necesita, y también aseguran en el seno de formación que están preparados, de obtener la confianza de la ciudadanía para gobernar, para regresar a la unilateralidad si fracasan las negociaciones con el ejecutivo estatal.
Por parte de la CUP, su recientemente designada candidata a los próximos comicios, Laia Estrada, considera que la propuesta de Aragonès sitúa a Cataluña en el mismo punto que hace una década: «Hace 10 años, Jordi Turull, Marta Rovira y Joan Herrera hacía la misma propuesta, cogiendo otro artículo, el 150.2, y lo llevaban a Madrid, y en Madrid se perdía la votación, es lo que pasaría ahora», explicó ayer, por lo que tampoco valida la intentona. «El Estado solo se avendrá a nuestro derecho a la autodeterminación cuando no tenga más remedio», explicó la
«La propuesta de Aragonès no es nueva, es igual que el Pacto Nacional del Referéndum de 2017»
dirigente anticapitalista, de acuerdo con Dalmases, «solo con un marco de ruptura, de desobediencia institucional, acompañada de una gran movilización popular se podrá forzar algún tipo de mediación internacional que lleve al Estado a reconocer el derecho a la autodeterminación», concluyó, yendo más allá. La candidata de los comunes, Jéssica Albiach, denunció, por su parte, que pese a ser favorable a que «Cataluña decida su futuro», Aragonès solo está pensando en votos. «Habla más del referéndum ahora que es candidato que cuando era presidente», apuntó, que no esconde su preferencia por formar un tripartito progresista tras el 12-M.