Los morados piden cargos y el PSN pausa el diálogo
En Navarra, todos los ojos estaban ayer puestos en la reunión prevista entre el PSN, Geroa Bai, Podemos e I-E para intentar llegar a un acuerdo de Gobierno que a todas luces encabezaría la socialista María Chivite. Pero, al final, el encuentro no tuvo lugar. La decisión la tomó de forma unilateral el Partido Socialista para estudiar las diferentes propuestas que ahora mismo tiene sobre la mesa. La más polémica de ellas llegó el miércoles de mano de Podemos: sus dos parlamentarios en la Cámara apuestan de forma «clara y decidida» por la «presencia de consejeros o consejeras de la formación morada en el próximo Consejo de Gobierno».
«Hay un diálogo permanente y fluido y se han hecho una serie de peticiones y propuestas y las tenemos que estudiar», indicó el socialista Ramón Alzórriz para justificar la parálisis. Además, no quiso detallar si ya existe fecha para el próximo encuentro. «La sociedad se ha cansado de conflictos y vota para que los partidos nos pongamos de acuerdo, y en eso estamos en Navarra, con ahínco, rigor e ilusión», añadió, y confesó que no descarta la posibilidad de que se dé un gobierno de coalición: «Tiene que ser un acuerdo diferente y estamos abiertos a que haya un gobierno en el que pueda hacer integración por parte de otros partidos».
Los resultados de los comicios del 26 de mayo arrojaron un panorama complicado para la gobernabilidad en la Comunidad Foral: Navarra Suma fue la fuerza más votada con 20 representantes, pero no tiene aliados naturales para formar un ejecutivo estable. Por detrás aparecen el PSN (11 diputados), Geroa Bai (9) y Bildu (7). La coalición abertzale ya fue clave para la composición de la Mesa del Parlamento, tanto que logró «colar» a uno de sus representantes a cambio de su beneplácito para ceder la presidencia del órgano a Unai Hualde (Geroa Bai).