Manifestantes de Vox reivindican en Valencia que «España existe»
La concentración se convocó frente a todos los ayuntamientos de España, pero en el caso de Valencia, se trasladó a la plaza Manises, para no coincidir con la cabalgata de las Magas
Militantes y simpatizantes de Vox se concentraron ayer en Valencia para reivindicar que «España existe», defender la unidad nacional y exigir al Gobierno de Pedro Sánchez que respete la soberanía del pueblo español y la Constitución.
La manifestación, convocada por Vox frente a los ayuntamientos de toda España bajo el lema «España Existe», se celebró en el caso de Valencia ante el Palau de la Generalitat, al haber aceptado la formación trasladarla con el fin de que no coincidiera con la Cabalgata de las Reinas Magas.
Este traslado fue negociado y confirmado por la Delegación del Gobierno, que ante la posible coincidencia de ambas citas propuso a los organizadores de la protesta cambiar su lugar de celebración, a lo que estos accedieron pasando a convocar la concentración ante el Palau de la Generalitat para reclamar «un Gobierno que respete la Constitución y la soberanía».
De este modo, los asistentes llenaron la plaza de Manises de banderas de España y pancartas contra los gobernantes valencianos, y corearon vivas a España y al Rey.
El diputado del Vox en el Congreso Ignacio Gil Lázaro fue el encargado de leer el manifiesto, en el que se reivindica que «España existe» y no debe sentir vergüenza de su identidad, ni rechazar su épica ni su historia, pues se ha hecho con el esfuerzo y sacrificio de los antepasados, «con un patrimonio y una soberanía hoy amenazados por un Gobierno en manos del separatismo».
En este sentido, se exige al Gobierno que respete la soberanía del pueblo español y la Constitución, y que combata a los «enemigos del orden constitucional», y al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que «traiga detenido al golpista Puigdemont» y detenga al «condenado Quim Torra».
Gil Lázaro advirtió de que hay millones de españoles que no van a «permitir que un gobierno de las características del que se ha formado pueda poner en almoneda la Constitución», y aseguró que «España no se vende» ni tampoco «la libertad, el pluralismo, la convivencia y la reconciliación de los españoles».