La Razón (Levante)

Por fin una certeza en la portería

Ha recuperado su mejor versión: «Ha sabido trabajar sin bajar los brazos», dice Zidane

- JOSÉ AGUADO-

CourtoisCo­urtois tenía una de las visiones más diferentes al resto acerca de la falta de Fede Valverde a Morata en la final de la Supercopa y que tanto ha dado que hablar en los últimos días. Todo el mundo considera que al centrocamp­ista del Real Madrid le quedaban pocas opciones y que derribar al delantero del Atlético era lo mejor que se podía hacer. Todos, menos Courtois, el único del campo que vio venir a Morata de frente y que, si hubiese podido, hubiese recomendad­o a su compañero que no se tirase al suelo, que no se jugase la tarjeta roja. Que él. Thibaut, iba a llegar a la pelota y a evitar el tanto.

Y lo cierto, ahora, es que gran parte del madridismo coincidirí­a con su portero, al que por fin ve como un futbolista que da puntos o, en el caso de la Supercopa, que da títulos, como hizo con sus paradas decisivas en la prórroga y deteniendo uno de los penaltis de la tanda. Si hay alguien que no ha duda de Courtois es el mismo Courtois, un hombre seguro de sus condicione­s y al que los hechos, sus paradas, le han dado la razón en los últimos días. Atrás ha quedado la pasada campaña, en la que estuvo al mismo nivel que el resto del equipo y las dudas al comienzo de ésta. Es probable que la falta de Keylor Navas, la ausencia de un competidor, le haya permitido jugar con más tranquilid­ad porque sabe que no arriesga la titularida­d en cada partido.

Él es el portero principal y nadie duda sobre eso. Uno de los abrazos más significat­ivos tras la tanda de penaltis del pasado domingo fue el que le dio Areola, el portero suplente, que también ha tenido sus oportunida­des este curso, feliz con el éxito del guardameta titular. Eso es lo que significa ser un equipo. No es sólo Areola quien está contento con Courtois, el resto del equipo se siente más protegido con la mejor versión de un guardameta que a este nivel es uno de los mejores del mundo: «Creo que ha demostrado desde el principio y en el pasado que es un gran portero. Siempre ha sido de los mejores porteros del mundo y después de momentos complicado­s, que le pueden pasar a cualquiera, ha sabido seguir trabajando y no bajar los brazos. Él sabía el nivel que tenía y poco a poco ha salido de ese bajón y ahora mismo estamos encantados con su nivel», aseguró ayer Zidane en la conferenci­a de Prensa previa al encuentro de esta tarde contra el Sevilla.

El Real Madrid va de rival terrible en rival terrible sin descanso en este mes de enero. Fue en Sevilla donde empezó a demostrar los síntomas de una recuperaci­ón que ahora es evidente. En el Sánchez Pizjuán empezó mostró una confianza y una seguridad que ahora son una seña de identidad. Pasó por la Supercopa de España recibiendo sólo un gol de penalti y cerró la primera vuelta con sólo 12 tantos en contra, una marca que no se veía desde mediados de los ochenta, cuando era Paco Buyo el dueño de la portería.

Ha mejorado la defensa, incluso cuando no está Sergio Ramos, como sucede hoy. El capitán intentó hasta el último segundo disputar el encuentro de hoy, pero el cuerpo técnico y los médicos se lo impidieron. Tampoco estará Bale, fuera de la convocator­ia. Sí Benzema, listo ya tras su lesión. El delantero es un seguro de vida para el conjunto blanco. Lo mismo que también lo es ya Courtois.

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EFE Courtois, en Valdebebas, en la sesión previa al partido con el Sevilla

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