La Razón (Levante)

ZP en Bolivia

- César Vidal

EnEn 2005, el Grupo Risa telefoneó a Evo Morales, recienteme­nte elegido presidente de Bolivia. Uno de los humoristas fingió ser ZP y Evo Morales se puso al teléfono inmediatam­ente y, desconoced­or de la burla, reveló informació­n altamente delicada. Se pudo escuchar las «muchas ganas de acompañar a Fidel, a Chávez» que tenía y, sobre todo, cómo agradecía la ayuda que había recibido del gobierno de ZP a través de un personaje llamado Bernardino. El respaldo del PSOE a Morales no se limitaba a ZP ya que también señaló que en diciembre lo había llamado Felipe González «alentándon­os». Igualmente, quedó de manifiesto que ahora que Morales había llegado al poder, recibiría más dinero público de España. Que Evo Morales se identifica­ra con las dictaduras de Cuba y Venezuela no iba a ser obstáculo. De manera bien llamativa, el PP no movió un dedo frente a esas acciones del gobierno de ZP aunque existían indicios poderosos de una clara injerencia en las elecciones de una tercera nación e incluso de malversaci­ón de caudales públicos. El tiempo fue pasando y el panorama se ha ido aclarando. Morales ha quedado expuesto como un dictador repugnante creador de un narcorégim­en. Desprovist­o del respaldo de las fuerzas armadas y policiales que se negaron a reprimir al pueblo tras el enésimo fraude electoral de Morales, el déspota boliviano no tuvo otro remedio que huir. Naturalmen­te, el gobierno boliviano ha comenzado a investigar a quién pagaba Morales y entre los nombres aparecen, de momento, una entidad vinculada a algunos dirigentes relevantes de Podemos, el juez Garzón y ZP. No deja de ser significat­ivo que el único que ha dicho, de manera bastante nerviosa, dicho sea de paso, que no piensa testificar ante la justicia boliviana haya sido ZP. Entre los motivos para no dar cuenta del dinero, presuntame­nte, percibido del tiranuelo boliviano, ZP ha alegado que «Les vi hacer un acto rezando los ritos evangélico­s», razón, por lo visto, suficiente para no comparecer ante un juez. La realidad es que ZP debe comparecer ante la justicia boliviana para esclarecer la verdad de lo sucedido. ¿Fue financiado con dinero procedente del narcotráfi­co de Morales? ¿Ha cobrado de la dictadura boliviana en agradecimi­ento a la ayuda que le proporcion­ó cuando fue presidente del gobierno? Eso y más tiene que quedar aclarado no por ZP sino por el prestigio de España. No puede suceder como en 2005.

Desprovist­o del respaldo de las fuerzas armadas y policiales que se negaron a reprimir al pueblo tras el enésimo fraude electoral de Morales, el déspota boliviano no tuvo otro remedio que huir»

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain