VUELTA AL RUEDO

L13

Igualdad. La vida es como el fútbol. –¿Cómo el fútbol?

Sí. Si fútbol es fútbol y política es política, vida es vida. –Caigo, lo pesco. Siga. Me fascina el gobierno del ya, oficialmente, funcionario Pedro Sánchez. Ya no está en funciones en la Moncloa. Desde el otro día, Pedro Sánchez es el Luis Enrique del Gobierno, un Gobierno con un vestuario de 22 ministros, casi como el Real Madrid.

–¿Y todos con la calidad y el talento de los jugadores estrellas del «César» de la Champions?

Por el bien de España, eso se espera.

–¿Luego no es un Gobierno Frankenstein?

Es de suponer que ya no. Es un Gobierno mitad hombres y mitad mujeres.

–Original, fascinante, ya veremos.

Que es un mentiroso recalcitrante Pedro Sánchez, y hoy dice ¡oh! y mañana ¡ah!, pues quizá, no digo concluyentemente ni que sí ni que no. Lo cierto, no obstante, hoy, es que prometió igualdad y ahí está la igualdad: once mujeres contra once hombres en el estadio de la Moncloa.

M14

Miedo. En el Dakar, esa loca competición de arena, pedregales, peligro y miedo, ha muerto el portugués Paulo Gonçalves, piloto de motos veterano en el «arte» de jugarse la vida sobre dos ruedas. Y muy querido entre sus compañeros.

–Era tan buena persona como buen piloto –leo que dicen de él–. Nada le asustaba, no tenía miedo al riesgo, era un bravo de coraje y corazón.

Riesgo, casi nada: juega con la vida.

–Ser valiente es no tener miedo.

Me lo dijo Ángel Nieto cuando los dos éramos jóvenes y él pilotaba motos sin miedo a nada y yo entrevistaba en TVE.

–Ángel, ¿qué es el miedo para ti? –le pregunté en una ocasión.

Ángel no sólo era piloto de muchos cojones, era también piloto con el que daba gusto conversar: razonaba con el sentido común de la humildad.

–¿Miedo? Un sentimiento. El miedo –siguió– es como el amor: se siente o no se siente. Yo no lo siento todavía. A lo mejor, no digo que no, el día que lo sienta «cuelgo» la moto.

Vivir y llegar a la cima de la gloria sin sentir miedo. El miedo, eso que aterroriza a algunos y hace miuras de oro a otros.

X15

¿Debe de premiarse a quien ni es estético ni ético? Sí y no, según del lado en que se esté. El Madrid ganó la Supercopa en los penaltis, pero poco antes, gracias a una falta tan antiestética como antiética, Valverde, derribó a Morata. Gracias a ese «mal», a esa falta, Valverde, probablemente, malogró una gran ocasión de gol –y posiblemente de victoria–, del Atlético. ¿Debe elogiarse a quienes proceden como Valverde? Y aquí, lo de Campoamor, todo es según el color con que se mire. Moralmente, estéticamente, éticamente, no. Pragmáticamente, sí, según Guardiola y ZZ.

La ética y la estética, esas muletas de señorío y respeto a la ley, no siempre son apetitosas, pragmáticamente. Ahí está, en el terreno de juego de la política, como muestra y paradigma de lo que pensamos, el otro «escándalo» de la semana: el nombramiento de Dolores Delgado como fiscal general del Estado. De ministra de Justicia de Pedro Sánchez a fiscal general de Estado de Pedro Sánchez.

–Eso –me comenta un fiscal– no es honorable ni para ellos ni para el cuerpo.

J16

Estrenos. Dos estrenos substanciosos esta semana. Pedro Sánchez estrena equipo (22 braquicéfalos) y el Barça, entrenador: Quique Setién, también braquicéfalo. –¿Braquicéfalos? –Gente de masa cerebral sobresaliente. Es de desear que ninguno salga dolicocéfalo.

Sánchez y sus fichajes, a lo mejor sorprenden y lo hacen todo de vuelta a la piel de toro de la querida España con banderillas de fuego a Torra y a su panda.

Setién. Su currículo, como él reconoce, no es de vuelta al cuadrilátero del fútbol, pero es majo y su padrenuestro como hombre creyente (del balón redondo) es que el fútbol debe de ser siempre un espectáculo de posesión y belleza (y de goles, por descontado).

Y a Valverde, pues adiós, hijo. Te «echan» habiendo ganado dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa, y dejando al Barça en situación de poder ganar Liga, Champions y Copa del Rey. El futbol tiene razones que la razón humana nunca entenderá.

V17

La personalidad es la majestad de cada uno. La majestad de Messi es su capacidad goleadora y su arte con el balón en los pies, y hoy, por consiguiente, la personalidad del Barcelona es Messi. La majestad de Simeone es la jerarquía defensiva del Atlético, y el Atlético, hoy, por lo tanto, es la personalidad del argentino.

¿Ensombrece Simeone la personalidad del joven, divino tesoro, Joao Félix? Por lo que me llega, el chaval anda algo murrio.

–Yo aquí no soy el que soy– filosofa para sus adentros.

Creíble. Joao es «joya» del balón. Se le nota en muchas cosas, pero… Simeone: sácale brillo. Consigue que el Atlético sea también la personalidad de Joao.