Al próximo Dakar me voy contigo
Carlos Sainz ha vuelto a demostrar, ojalá no por última vez, que es un gran campeón por su talento al volante, su capacidad de sacrificio y su humildad
«Me sigo divirtiendo». Es la clave, querido Carlos. Se te nota. Te has preparado a conciencia. Horas y horas, días y días de mucho trabajo pensando en el Dakar para llegar en plenas condiciones a una prueba durísima con casi diez horas diarias en carrera. Y la has ganado por tercera vez, terminando como un chaval. A tus 57, has demostrado que la ilusión no tiene límites.
La bandera en lo más alto Me ha gustado mucho el abrazo con tu hijo al llegar a Barajas. Un Carlos Sainz Jr. orgulloso de ti. Como estamos todos viéndote subir a la cima y dejando la bandera de España siempre en lo más alto. ¿Dónde están los que te llamaban gafe por aquel «trata de arrancarlo, Carlos»? Te quedaste a pocos metros de la meta en el RAC de Inglaterra. Podrías tener tres
Mundiales de Rallys sin ese golpe de infortunio, pero los campeones lo son porque se sobreponen a las dificultades. Y rendirse no ha ido nunca contigo.
Descansa y reflexiona No hace falta que digas que no vas al Dakar a «tomar el sol». Tu carácter te lo impide. Y ahora no tengas prisa por decidir tu futuro. Te has ganado el derecho a elegir si quieres seguir o no. Es bueno que reflexiones sin prisa y descanses junto a tu familia.
Has ganado tu tercer Dakar terminando como un chaval. A tus 57 años, has demostrado que la ilusión no tiene límites»
¿Dónde están los que te llamaban gafe? Los campeones lo son porque se sobreponen a las dificultades y rendirse no va contigo»
Aquel día en tu coche Yo soy egoísta: me gustaría verte de nuevo al volante. Soy un privilegiado: tuve la suerte de estar contigo en un coche. Con la seguridad de que estaba en manos del mejor. Pasé miedo, no por tu culpa sino por la mía. Hasta bajaste la velocidad al oír mis gritos. Pero ese día entendí lo grande que eres. Llevas el coche más rápido que nadie por terrenos imposibles. Pero, sobre todo, me ganaste por tu humildad.
Un ejemplo para todos Por eso eres un campeón. Los triunfadores son siempre los más humildes. Eres un espejo en el que deben mirarse los demás pilotos. Los veteranos para recoger tu mensaje de que todo es posible. Y los jóvenes para que entiendan que esforzándote se pueden cumplir los sueños. Incluso Alonso, que le ha dado más vidilla al Dakar, fue el primero en felicitarte. También hemos disfrutado con él, al igual que lo hemos hecho todo el año con tu hijo en la F-1. Ha sacado la casta del padre.
Gracias por todo Pero el protagonista has vuelto a ser tú. Quiero darte las gracias por lo que nos has hecho disfrutar en tu último éxito y por todos los momentos que nos has regalado durante tu brillante carrera. Y te tomo la palabra: si Lucas no puede, al próximo Dakar me voy contigo.