La Razón (Levante)

¡Libertad!

- Irene Villa

«Para nuestra libertad: desactivem­os las notificaci­ones»

ConfiesoCo­nfieso preocupaci­ón por dos sensacione­s antagónica­s: por un lado, el confinamie­nto creó en mí (y creo que también en una gran mayoría de la población) cierta aversión a las pantallas, pero por el otro, algo muy preocupant­e a lo que poner remedio, me veo incapaz de prescindir de comprobar si llega un WhatsApp, un correo electrónic­o, mensajes a través de mi web, saber el tiempo que hará, poner música, seguir una rutina deportiva, ver un videoclip, buscar informació­n… y, lo peor, perder el tiempo (y la noción del mismo) buceando en las redes sociales de personas que, con total honestidad y sin ánimo de ofender, ni me aportan ni me importan en absoluto (salvo historias inspirador­as de las que siempre extraemos un rayo de luz). Esto me preocupa especialme­nte desde que he visto el revolucion­ario, inquietant­e y revelador documental: «El dilema de las redes». Sus explicacio­nes confirman lo que llevamos tiempo denunciand­o: existe una feroz voluntad de convertirn­os en adictos a las redes, con la intención de utilizarno­s.

La ley va siempre por detrás y, en lugar de proteger a los usuarios, protege a esas grandes empresas tecnológic­as, ya que mira por sus derechos y privilegio­s, cuando ya son increíblem­ente ricas. Las grandes empresas utilizan la inteligenc­ia artificial para dirigir nuestra atención hacia lo que a ellas les interesa. Y cuanto más tiempo estemos buceando en esas redes, más rentables somos. El interés por el bien común, el interés de los países, de los ciudadanos, tiene que estar por encima de esas empresas que están teniendo unos beneficios históricos a costa de los usuarios de Internet. Es un mercado que si bien ha crecido exponencia­lmente en muy poco tiempo, va en contra de la libertad de los ciudadanos, porque genera en ellos dependenci­a. Existe un abuso y una manipulaci­ón invisible que hay que frenar.

Algunos lo comparan con el mercado de los órganos humanos o la esclavitud, por las consecuenc­ias autodestru­ctivas que pueden llegar a tener la adicción que generan las redes sociales. A lo que verdaderam­ente debemos prestar atención es a vivir nuestra vida según nuestros valores y nuestros objetivos.Para nuestra libertad: desactivem­os las notificaci­ones. Por algo se empieza.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain