Malick, tarde y mal
Dirección y guión: Terrence Malick. Intérpretes: Christian Bale, Cate Blanchett, Natalie Portman, Brian Dennehy. Estados Unidos, 2015. Duración: 118 minutos. Drama.
Podría ser una adaptación en clave poética y heterosexual de una novela primeriza de Bret Easton Ellis, con sus fiestas en piscinas con forma de riñón, sus top models ligeras de cascos, la dolce vita derramándose por un baño de lujo, las luces de Los Ángeles brillando como luciérnagas en la noche y un hombre, un famoso, un creativo de la industria (Christian Bale), saltando de flor en flor para curar sus heridas. Pero es una película de Terrence Malick, en su prolífica etapa de cine improvisado y susurrado desde el cosmos, y se le supone una cierta profundidad. En la línea de «To the Wonder», la cámara de Emanuele Lubezki embellece playas y crepúsculos para romper el chasis contra la crisis de un tipo que se ha dejado llevar por el lujo y la celebridad, y para el que la relación con dos mujeres (Cate Blanchett y Natalie Portman) parecen oportunidades perdidas para sentar la cabeza. Si les parece banal, no se equivocan. Los personajes resultan meros títeres mecidos por el viento y los cócteles.
Lo mejor
Que el director sea capaz de convencer a tantas estrellas para aparecer en filmes así
Lo peor
Marca el episodio central de una deriva hacia la banalidad del cine de Malick
Sergi SÁNCHEZ