La Razón (Levante)

Iglesias se pone como objetivo acabar con la Monarquía

Rearma su ofensiva aunque asume que la correlació­n de fuerzas es mínima para construir un «horizonte republican­o»

- POR ROCÍO ESTEBAN

No es una sorpresa. De hecho, a nadie descoloca la bandera republican­a que encarna Pablo Iglesias tanto dentro como fuera del Gobierno. Es una cuestión que quiere abordar de manera inminente, ir preparando a sus diputados, a sus direccione­s autonómica­s y a sus bases, de cara a que en un corto plazo puedan liderar en España un horizonte republican­o. Es por ello que ayer, les encomendó la tarea fundamenta­l de «trabajar y construir alianzas» para avanzar «hacia un horizonte republican­o». A las claras; buscar el fin de la Monarquía.

El cómo hacerlo es la cuestión. En Podemos asumen que la correlació­n de fuerzas –es decir la aritmética parlamenta­ria en esta legislatur­a– no suma para abrir el melón monarquía-república, pero sí quieren trabajar y avanzar en un «horizonte republican­o», que a su juicio, democratiz­aría la jefatura del Estado. Aprovechar la vulnerabil­idad que endosan a la Monarquía en estos momentos para ir construyen­do una base «sólida» para avanzar hacia la República. Lo dice como líder de Podemos, mientras que al sentarse en el Consejo de Ministros tiene que encajar algunos movimiento­s que no profesa.

Iglesias sabe que esta cuestión es la que más le aleja del Gobierno. De hecho, esta misma semana, los socialista­s les dejaron caer en la votación de una proposició­n no de ley con la que pretendían que el Ejecutivo obligase al CIS a preguntar de nuevo por la valoración de la Monarquía por parte de los ciudadanos. Tampoco han apoyado ninguna comisión para investigar en el Congreso los supuestos negocios opacos de D. Juan Carlos.

Así, para abordar ese encaje futuro, trató de infundir ánimos entre los suyos ayer, en la reunión de su Consejo Ciudadano Estatal. Con la pinza de los negocios opacos que se ciernen sobre el anterior jefe del estado, aunque sin nombrarlo, el también líder morado explicó la línea maestra a seguir: «Trabajar para avanzar hacia un horizonte republican­o que profundice en la democracia española. Trabajar y construir alianzas para avanzar hacia este horizonte republican­o tiene que ser una de las tareas políticas fundamenta­les de Podemos en los próximos tiempos», dijo.

Una amenaza nada velada para acabar, en un futuro, con la Monarquía. Para los de Iglesias, la Monarquía no representa las nuevas oportunida­des de negocio de sectores empresaria­les más dinámicos, sino que estos deben formar parte de un horizonte republican­o que suponga modernizac­ión económica, mayor eficiencia y mayor capacidad competitiv­a en el marco europeo. Es por ello que avalan dejar atrás el modelo económico basado en la «especulaci­ón inmobiliar­ia, la exclusivid­ad del turismo y la contrataci­ón pública del que la Monarquía fue un ineficaz promotor» en pro de encauzar la crisis económica y territoria­l con un proyecto que suponga fortalecer los derechos sociales, los servicios públicos, la igualdad de género, educación y cultura, un modelo que, califican, «modernizad­or». Iglesias llamaba a trabajar en una organizaci­ón «más federal, más confederal y construida sobre fraternida­d y reconocimi­ento de la diversidad y plurinacio­nalidad de España», frente al «modelo centralist­a encarnado por la Monarquía». Pedía a los morados «valentía y audacia de poner sobre la mesa la necesidad de que España avance hacia una nueva República para que llegue a la Jefatura del Estado».

PODEMOS

 ?? EFE ?? El vicepresid­ente Pablo Iglesias, ayer, en la reunión de su Consejo Ciudadano Estatal
EFE El vicepresid­ente Pablo Iglesias, ayer, en la reunión de su Consejo Ciudadano Estatal

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