El PP pedirá a la Fiscalía que investigue si Illa se vacunó
El ex ministro de Sanidad se negó a hacerse una PCR para el debate electoral de TV3
Los populares denuncian que puso en riesgo la salud del resto de candidatos
del debate de TV3 de todos contra todos, y en el que el candidato del PP catalán, Alejandro Fernández, centró su «tiro» sobre todo en Vox, ahora el PP prepara el «armamento» dialéctico para dirigirse a la Fiscalía para solicitar que investigue si el ex ministro y candidato socialista, Salvador Illa, se ha vacunado incumpliendo el calendario establecido. Con esta nueva polémica marcará la recta final de la campaña del 14-F.
En su escrito, el PP plantea que existen sospechas razonables que apuntan a que el candidato Illa no quiso someterse a un test de anticuerpos y antígenos previo al debate de TV3 «porque pudiera estar vacunado». Añade que ésta es una de las hipótesis que muchos ciudadanos están planteando en este momento y a la que el candidato no está respondiendo con pruebas que demuestren lo contrario.
Por eso, el PP pide a la Fiscalía que actúe exactamente de la misma manera que actuó en Murcia ante la sospecha de que algunos cargos se estaban vacunando y ante las denuncias del Partido Socialista. Aquella investigación le costó el cargo al consejero de Salud, Manuel Villegas, del PP. Además de él, hasta 400 trabajadores de su consejería recibieron la primera dosis de la vacuna.
El PP recuerda que un día después de la denuncia del Partido Socialista, la Fiscalía Superior de Murcia pidió la lista de vacunados al Servicio Murciano de Salud. Ahora, exige a la Fiscalía General del Estado que con la misma diligencia y con la misma objetividad pida documentación al Ministerio de Sanidad sobre la lista de vacunados en dicho Ministerio y, en concreto, si el señor Illa ha podido vacunarse irregularmente. «Pedimos unidad de criterio en torno a las actuaciones de la Fiscalía, sea cual sea el territorio y sea cual sea el partido al que afecte».
Si la Fiscalía no pide la lista de vacunados al Ministerio de Sanidad, y no aclara si el ministro ya está vacunado, «estará aceptando que actúa solo cuando se trata de casos relacionados con el Partido Socialista», sentencian en la dirección popular.
Lo cierto es que no solo el PP agitó las sospechas sobre Illa. También Esquerra aprovechó para explotar la polémica y extraer rédito electoral. Oriol Junqueras, que participó en un mitin en Manresa (Barcelona), fue diDespués e interpeló al candidato socialista: «¿Es que quizás el ministro de Sanidad aprovechó su cargo para vacunarse como hizo la cúpula militar del Ejército español?». «Tenemos derecho a saber la verdad», añadió el líder del partido republicano, que ha situado al PSC como rival a batir para proyectarse como voto útil en el bloque independentista.
Laura Borràs (JxCat) se limitó a la crítica retórica en un mitin en Girona, pero evitó alimentar las sospechas contra el exministro de Sanidad. «Illa ha dado positivo en el test de la irresponsabilidad, y ha dado negativo en el test de la ejemplaridad. Este es el ejemplo del producto que nos envía el PSOE para presidir la Generalitat», aseveró la candidata del partido de Carles Puigdemont, que es consciente de que tampoco puede entrar a la carga con aspectos personales de este tipo porque está imputada por la presunta adjudicación a dedo de contratos públicos a un amigo cuando dirigía la Institución de las Letras Catalanas.
Ciudadanos, que es el partido más castigado por la irrupción de Illa porque puede arrebatarles una importante bolsa de votantes, optó por la vía parlamentaria y registró una pregunta en el Congreso de los Diputados: «¿Se ha vacunado Salvador Illa o algún otro miembro del Gobierno de España contra la Covid-19 a fecha de hoy 10 de febrero de 2021 en que los colectivos a vacunar están perfectamente definidos y no incluyen casos como el descrito?», informa C. S. Macías.
Desde su irrupción como candidato del PSC, Illa ha conseguido desarrollar una campaña sin errores y se ha consolidado como claro aspirante a la victoria –la mayoría de encuestas le sitúan en primera posición–. Sin embargo, en una campaña electoral no hay margen para el más mínimo malentendido porque puede generar un incendio y los adversarios siempre están al acecho para aprovecharlo.
Y, en este sentido, pese a que el PSC trató de zanjar la controversia de inmediato, fue cogiendo vuelo a lo largo de toda la jornada y puede tener un importante impacto de ahora hasta el domingo. Desde el partido se niega que se haya vacunado: «Se vacunará cuando le toque por grupo de edad tal y como establecen los protocolos de vacunación», aseguran. Asimismo, se trató de dar explicaciones sobre las razones que condujeron a Illa a no hacerse el test, pero fue en vano porque los rivales avivaron la polémica.
Así, el PSC argumentó que Illa no se hizo ni PCR ni tests de antígenos para cumplir con los protocolos sanitarios estipulados por la Generalitat de Cataluña, que marcan que solo se pueden hacer estas pruebas si una persona es contacto estrecho de un positivo o tiene síntomas. Los socialistas catalanes defienden que «ninguno de estos dos supuestos se dieron en las 72 horas previas» y recuerdan que en el resto de debates que ha participado no se ha requerido ninguna prueba. De hecho, señalan que el propio Illa había acudido por la mañana a TV3 –a los mismos estudios– a una entrevista y tampoco se le exigió el test, informa J. Gallego.
Además, subrayan que Illa ha sido ministro de Sanidad hasta hace poco, desde donde explicaba que las pruebas de coronavirus solo pueden hacerse a los grupos de población que así lo requieran. «Las pruebas diagnósticas para detectar la COVID-19 hay que hacerlas siguiendo los protocolos y la estrategia COVID acordados al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud», sostienen los socialistas. Asimismo, aducen que «la asistencia a un debate político en ningún caso puede suponer el incumplimiento de los protocolos».
La polémica se cruza en el carecto mino de Illa en el peor momento porque la igualdad por arriba (entre el PSC, ERC y JxCat) es máxima y no hay margen para el error. Hasta el momento, el candidato socialista ha conseguido surfear todos los ataques –muchos de ellos relacionados con su gestión de la pandemia al frente del Ministerio de Sanidad– y, de hecho, los ha aprovechado para impulsar su candidatura ya que le ha permitido concentrar mucho foco y asentarse como claro favorito para vencer. La polémica estará presente en el debate de esta noche en La Sexta, que puede ser decisivo para el desenlace electoral.