Por un futuro compartido con todas las especies
El cuidado de los ecosistemas sustenta todas las formas de vida
Cada 22 de mayo se celebra el Día Internacional de la Diversidad Biológica −también llamado Día de la Biodiversidad− con el objetivo de concienciar a la ciudadanía y promover acciones enfocadas a la preservación de los ecosistemas naturales. Este año, bajo el lema «Construir un futuro compartido para todas las formas de vida», esta jornada se centra en destacar la importancia de la biodiversidad como la única manera de asegurar el futuro de las civilizaciones.
En esta línea, Agbar, grupo con una trayectoria de más de 150 años en la gestión del agua, se compromete a la preservación del medio ambiente y al cuidado de los recursos naturales a través de diferentes iniciativas que van desde proyectos de naturalización de las instalaciones del grupo a campañas de sensibilización en pro de la sostenibilidad.
Desarrollo sostenible
Entendemos por biodiversidad la amplia variedad de plantas, animales y microorganismos que existen, así como las diferencias genéticas dentro de cada cultivo, la variedad de ecosistemas, las interacciones entre sus miembros y su entorno. Según Naciones Unidas, este conjunto de recursos biológicos supone el pilar indispensable en el que se sustenta la humanidad. Sin embargo, tres cuartas partes del medio ambiente terrestre y alrededor de un 66% del medio marino ya han sido alterados precisamente por la actividad humana.
Según el último informe de la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES) ya son más de un millón de especies animales y vegetales los que se encuentran encuentran en peligro de extinción.
A pesar de los avances tecnológicos, la vida depende de la conservación de los ecosistemas: agua, alimentos, medicina, fuentes de energía, refugio… La biodiversidad sigue siendo la respuesta para regenerar el planeta y conseguir un futuro sostenible, por lo que conservarla es fundamental incluso para asegurar nuestra propia supervivencia.
Darnos cuenta de que podemos ser parte de la solución es esencial para poner fin al daño que estamos causando a la naturaleza
Tomar medidas urgentes
El Objetivo de Desarrollo Sostenible nº 15 establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2015 y que se pretende alcanzar de cara a 2030 hace referencia a la importancia de detener la pérdida de biodiversidad y promover el uso sostenible de ecosistemas terrestres y agua dulce. Alineado con este objetivo, el grupo Agbar ofrece soluciones innovadoras en torno a la gestión del agua, los recursos naturales y la salud ambiental para las ciudades, la agricultura y la industria.
Este compromiso por el medio ambiente se materializa en proyectos de naturalización y soluciones basadas en la naturaleza, la apuesta por la incorporación de la biodiversidad en las zonas urbanas de cara a hacerlas más habitables y resilientes al cambio climático y la sensibilización sobre el buen uso y el cuidado del agua y el medio ambiente.
Estrategia de naturalización
Actualmente, el grupo Agbar cuenta con 90 plantas de tratamiento de agua con diagnóstico de biodiversidad y planes de acción de naturalización. El 80% de ellas se encuentran en espacios naturales protegidos, donde el objetivo es favorecer la biodiversidad y las funciones ecológicas del entorno.
Desde 2017 Agbar ha implementado una gestión diferenciada de las zonas verdes: se ha reducido la frecuencia de siega y se han sembrado semillas de buena calidad ecológica, se han creado jardines con especies de plantas que ayudan a mantener la vida de mariposas y polinizadores y hoteles de insectos y microhábitats.
Además, en la depuradora de Begudá se está restaurando un humedal de depuración que se dejó de utilizar en 2005 para contribuir a la mejora de la calidad el agua del río a la vez que se recupera el ecosistema acuático y, por tanto, la vida de varias especies en peligro de extinción.
Depuradora de Cabezo Beaza
El 100% de las aguas de esta planta se vuelven a destinar al riego agrícola, por lo que, además de favorecer la limpieza del agua, se contribuye a la sostenibilidad hídrica de una región muy afectada por la sequía. Además, las lagunas artificiales construidas para almacenar el agua sirven de refugio a más de 30 especies de aves acuáticas, muchas de ellas en peligro de extinción, como la malvasía cabeciblanca.
Delta del Ebro, Tarragona
Se trata de uno de los espacios de mayor valor ecológico de nuestro país: tanto es así, que los humedales artificiales de depuración de Illa de Mar del Embut fueron declarados incluso reserva natural de la fauna salvaje por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña. Además, tiene un gran interés desde desde un punto de vista ornitológico, ya que se pueden observar 48 especies de aves distintas, de las cuales, 33 se encuentran incluidas en el catálogo de especies amenazadas.
Biodiversidad en zonas urbanas
Con el objetivo fundamental de conseguir zonas urbanas más resistentes al cambio climático, Agbar trabaja también en estos espacios. Es el caso del parque El Recorral de Rojales, en Alicante, donde se han construido cinco lagunas con más de 5.000 m3 de capacidad que funcionan como un humedal y se ha acondicionado el espacio para que funcione como un área recreativa en la que disfrutar plenamente de la naturaleza, en la que se han introducido nuevas especies vegetales y animales. Además, se han instalado refugios para aves y murciélagos que se alimentan de insectos con el fin de evitar el uso de pesticidas artificiales y otros productos químicos.
El buen uso del agua
Como la biodiversidad nos afecta a todos y todos debemos ser parte de la solución, Agbar también fomenta la cultura de conservación del medio ambiente a través de programas tales como BiObserva Voluntariado, una iniciativa que ya se ha implantado en más de 95 instalaciones de la que forman parte más de 270 trabajadores de manera voluntaria para analizar las especies que nos rodean con el principal objetivo de llevar un registro y poder diseñar planes de conservación en consecuencia.