El abuso de pornografía, germen de las agresiones
► Expertos alertan de que los adolescentes están normalizando modelos de dominación
El abuso y el uso cada vez más temprano de la pornografía y los modelos distorsionados de pareja y de relaciones que ofrece a la adolescencia puede ser una de las causas del aumento de violaciones grupales cometidas por menores de edad que han normalizado modelos de dominación y agresividad hacia las chicas.
Así lo explican a EFE los psicólogos valencianos Enric Valls y Nika Vázquez al hilo de la detención de cinco menores -que han quedado en libertad vigilada- por la supuesta agresión sexual, una de ellas grupal, que habrían sufrido dos niñas de 12 y 13 años en Burjassot (Valencia).
El uso cada vez más temprano de las nuevas tecnologías, la visión distorsionada de las relaciones que ofrece el porno de consumo masivo, la falta de control parental sobre los contenidos a los que acceden los menores y la falta de autoestima y de empatía son factores que fomentan las conductas violentas en edades en las que se está formando todavía la personalidad y el conocimiento de lo que está bien o está mal.
Valls asegura que existen varios tipos de problemáticas asociadas a las tecnologías y al sexo, como el ciberacoso o «grooming» -cuando un adulto se hace pasar por un menor y pide contenido audiovisual sexual a un menor para después chantajearle- o el «sexting» -el intercambio de imágenes o vídeos de contenido sexual-.
Los jóvenes «se pasan fotos sin miramientos, sin ser conscientes de que eso va a quedar ahí para siempre y se da una hipernormalización de la sexualidad en la que no todo vale», advierte este experto, sobre todo porque «no se corresponden con la edad con la que se están llevando a cabo».
«No se puede normalizar el uso de videojuegos violentos o sexuales» a edades tempranas porque «el niño se vuelve insensible» y lo ve como algo normal, añade. Explica que dentro de la pornografía hay diferentes vertientes, pero los vídeos más vistos no son de una mujer y un hombre sino de «una mujer rodeada de muchos hombres».