Bruselas no se cree las promesas de déficit de Sánchez
► Mejora el crecimiento de España, pero agranda su agujero presupuestario
Bruselas enfría las previsiones del Gobierno de Pedro Sánchez y duda de sus promesas. En el último plan de Estabilidad enviado al Ejecutivo comunitario, España España se comprometió a reducir el déficit público al 3% en el año 2024, un año antes de lo esperado inicialmente. Las previsiones de primavera publicadas por la Comisión Europea este lunes auguran, sin embargo, que nuestro país cerrará el año que viene con una cifra del 3,3% después del 4,1 % de 2022. Si se cumplen estos vaticinios, España no respetará las normas fiscales europeas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que volverán a reanudarse el año que viene, tras estar guardadas en el cajón durante los años de pandemia, y que limitan el déficit público al 3%. Aunque la Comisión Europea avala el optimismo del Gobierno sobre el crecimiento económico, también alerta de que los ingresos vivirán una desaceleración durante este año, después del «dinamismo» de los primeros meses.
Tras el crecimiento del 5,5% registrado el año pasado, Bruselas prevé que nuestro país crecerá un 1,9% este año, cinco décimas por encima de sus anteriores vaticinios. La Comisión Europea explica que durante el primer trimestre de este año el crecimiento ha sido del 0,5% gracias al «comportamiento sólido del sector turístico» y al efecto arrastre del año anterior. A pesar de que durante la última mitad del año pasado la alta inflación ha afectado al consumo y la inversión, el Ejecutivo comunitario cree que el buen comportamiento del mercado laboral –aunque España sigue siendo el país con más paro de toda la Unión Europea–, unido al incremento de las pensiones y del salario mínimo, además de la ejecución de los fondos europeos, son los responsables de esta mejoría. Esto hará que España recupere por fin el nivel previo a la pandemia entre el segundo y el tercer trimestre de 2023. Esto supone, en cualquier caso, un considerable retraso respecto al resto de las grandes economías de la UE.
Bruselas también alerta de que la restricción del crédito por la subida de los tipos de interés debido a la alta inflación complicará la posición financiera, tanto de familias españolas (la mayoría de las hipotecas son aún a tipo variable), como de la deuda pública. En cuanto a la gran bestia negra de la economía, la inflación, Bruselas cree que tras el pico del 8,3% de media en 2022 va a declinar gracias a la «moderación» de los precios energéticos y a las medidas de apoyo como la reducción del IVA en algunos productos. Esto hará que los precios crezcan un 4% en 2023 y un 2,7% en 2024, aunque por encima todavía del objetivo del Banco Central Europeo del 2%. A pesar de esto, el Ejecutivo comunitario también alerta de que la inflación subyacente (aquella que excluye a la energía y los alimentos frescos) va a permanecer en niveles altos.
En cuanto a la deuda, España es uno de los seis Estados en los que se vaticina que sea superior al 100% del PIB a finales de 2024, junto a Bélgica, Grecia, Francia, Italia y Portugal. Bruselas augura para nuestro país un 111% para 2023 y un 109% para 2024, frente a la media europea del 83%.
3,3% de déficit prevé la Comisión para 2023 en España, frente al 3% que asegura el Gobierno