Airbus prepara recortes en sus factorías de España
Aunque Boeing batalla contra la peor crisis de su historia, Airbus también tiene sus propios demonios que exorcizar. La compañía anunció ayer que cerró 2019 con unas pérdidas de 1.362 millones de euros por diversos gastos extra. A los 3.598 millones que tuvo que provisionar para el pago de multas por sobornos probados se sumó una segunda carga de 463 millones por el fin de la fabricación del A380 y una última especialmente dañina para España: 1.212 millones por cargos ligados a su avión militar A400M. Llamado a revolucionar el sector, el modelo se ha convertido en un agujero de 30.000 millones que va a tener consecuencias en las plantas españolas de Airbus.
El A400M se ensambla en Sevilla y es responsable en buena medida de que el 70% de los 13.000 empleados que el consorcio tiene en España dependan de su división de Defensa y Espacio. La mala situación del programa y del mercado de satélites han llevado a Airbus a tomar la decisión de preparar un programa de reestructuración con recortes para restablecer la rentabilidad de la división. Según informó en Toulouse Guillaume Faury, consejero delegado del consorcio, los detalles del plan se conocerán en las próximas semanas. Los ajustes, ha asegurado Faury, conllevarán «una dimensión social» que se gestionará «con responsabilidad», que ha evitado dar detalles de cómo puede afectar al empleo el programa, según informa Efe.