El Mirandés sale vivo
Todo se decidirá en Anduva Los burgaleses buscarán una final histórica en su campo, mientras que la Real Sociedad peleará por alcanzar el último partido de tres décadas después
ElEl fútbol celebraba ayer su San Valentín en San Sebastián. A unas horas del día de los enamorados, también al fútbol y a la Copa, Mirandés y Real Sociedad se citaban en la segunda semifinal de esta edición de «los modestos», que cuenta con el recién ascendido a Segunda División como último representante.
No tardó la Real en ejercer de anfitrión y después de merodear el área, Portu provocaba un penalti, que transformó Oyarzabal ejerciendo de capitán. El jugador realista caía en el área en un cruce con un defensor rival. Lejos de decaer, el Mirandés volvió a demostrar por qué le apodan «matagigantes» y reaccionaría con sus mejores minutos. Los burgaleses, sin intentar retar la circulación de la Real, optaron por colgar balones al área, basando su juego en el fútbol por alto, aunque arriesgándose al peligroso contragolpe realista. Uno de esos balones caería en los habilidosos pies de Matheus, segundo máximo goleador de la Copa, con seis tantos, solo por detrás de Isak (7). El brasileño tiró de sangre fría para recortar dentro del área y cruzar el balón. Con fortuna, tras tocar en Monreal, el balón entró en la portería de Remiro, al que solo un desvío involuntario pudo batir.
Normal que la Real quiera retener a Odegaard. El noruego, que si el Real Madrid no lo impide seguirá cedido en San Sebastián la próxima temporada, fue el autor del desempate. Inició y remató la jugada del tercer gol, después de dos grandes paradas de Limones, que volvería a salvar a los suyos al inicio de la segunda parte, deteniendo un disparo de Portu a bocajarro. Precisamente Portu dio una exhibición de condición física, corriendo por todo el campo y presionando la salida de balón del rival sin descanso, durante sus 77 minutos.
El sueco Isak terminaba su primer partido, de los últimos siete, sin marcar, siendo sustituido por Willian José. El brasileño fue bien recibido por el Reale Stadium, después de haber buscado su salida al Tottenham en el pasado mercado invernal y haber sonado como candidato para reforzar el necesitado ataque del Barça. Elustondo también fue sustituido en el mismo minuto, por Guevara. Así, Imanol Alguacil trató de controlar los últimos veinte minutos y mantener más juntas sus líneas, perdiendo verticalidad.
Los de Andoni Iraola, que se reencontraba con la Real después de su recordada etapa de jugador en el Athletic de Bilbao, no dieron por bueno el resultado. Aunque con el 2-1 ya mantenían muy vivas las opciones de conseguir un histórico pase a la final, los burgaleses no bajaron el ritmo, aunque tampoco corrieron grandes riesgos. Tras mantener la diferencia en un solo gol, se jugarán en su campo el poder replicar al Real Madrid Castilla, último equipo de Segunda División en alcanzar la final de Copa del Rey, y precisamente fue ante su equipo absoluto. Además, de conseguirlo, El Mirandés también superaría a su plantilla del 2012, una generación liderada por Pablo Infante que cayó en semifinales ante el Athletic de Bilbao.
Así, tras el partido del miércoles entre Athletic y Granada, los cuatro candidatos a la final siguen con grandes opciones de alcanzar el objetivo. El factor campo, el empuje de la afición burgalesa y el gran momento de Matheus son los argumentos en los que el Mirandés sostendrá sus esperanzas. Tras las dos victorias de los locales, todo se decidirá en Los Cármenes y Anduva.