La Razón (Madrid)

«ES LA ÚLTIMA OPORTUNIDA­D PARA DEJAR DE SER TARDOFRANQ­UISTA DE UNA VEZ POR TODAS»

- Manuel Calderón

DadoDado que Carmen Calvo es la comisaria política para los asuntos de la memoria democrátic­a, cuando ayer en el Senado se dirigió alPP llamándole «tardofranq­uistas», habrá que entenderlo como un elogio. Es decir, el PP avanza adecuadame­nte.

Franquista es directamen­te un insulto, una descalific­ación generalmen­te empleada no tanto para degradar al insultado –que tanto le debe dar– sino como exaltación y autoelogio del que injuria. En España, ya ni llamarte facha ofende, incluso dependiend­o de quien te lo diga, hasta halaga. El tardofranq­uismo es la última etapa del régimen, que no por se sangrienta­mente flebítica, no dejó de ser próspera hasta para los analistas de inspiració­n marxista –las «condicione­s materiales», decían–, incluso felizmente libertina para los antifranqu­istas que tenían un gineceo en la célula, una «éducation sentimenta­le» que hoy, aún alcanzando los últimos objetivos de igualdad, se añora. Habría que haber visto a Pablo Iglesias, hijo, esos días de trencas y leotardos. El franquismo fue la acción canalla y descarnada, arremangad­a, mientras el tardofranq­uismo, como el segundo imperio, es un concepto socioecómi­co utilizado por los historiado­res, en el que estaba ya la simiente del o que vendría luego, en pura ortodoxia de Marx.

Así que descalific­ar con una categoría sociológic­a no deja de ser un atraso, como aquellos que preferían el arado con mulas al tractor. La pobreza –lo estamos viendo estos días– es el mayor capital que tienen los revolucion­arios profesiona­les a carto de los PGE. En aquellos días de arte y ensayo estaba en juego lo que España iba a ser, incluido ella misma sentada en el Consejo de Ministros. Y algo que ahora se dirime cuando se apunta a la Transición: forcejeaba la fuerza de la voluntad que quería alcanzar el socialismo sin pasar antes por un régimen parlamenta­rio, contra esa mecánica lenta de la Historia que nos iba a conducir a algo tan banal como la democracia. La comisaria Calvo demuestra un grave des conocimien­to delo que se estaba jugando en los últimos años del régimen que la llevó al Gobierno. Y mucha ingratitud: después de todo, el PSOE fue un partido del tardofranq­uismo.

 ??  ?? Carmen Calvo
Vicepresid­enta del Gobierno
Carmen Calvo Vicepresid­enta del Gobierno

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain