Siempre Moyano
AnteAnte la duda, Moyano. Siempre. Y más si estamos celebrando el Día del Libro. Como este sábado. «Hay ambiente, la gente se está animando». «Es la gran fiesta de los lectores». «Estamos muy contentos». El diagnóstico de los expertos. Los libreros de la Cuesta más literaria de la ciudad se congratularon de la tregua meteorológica que concedió ayer esta primavera pasada por agua que nos ha tocado en suerte. Los madrileños y los turistas respondieron al paréntesis climático. Pudieron disfrutar, por ejemplo, de los fragmentos de «El mundo de Ayer», «María Estuardo», «Mendel el de los libros» o la «Novela de ajedrez» que dieron forma al homenaje teatralizado al escritor Stefan Zweig. Lo de ayer en Moyano, un San Jordi en pequeñito, también es un termómetro de los espacios de libertad que vamos recuperando en la ciudad tras la pesadilla de la pandemia. Como ocurrió hace unos días con la Semana Santa. Como sucederá hoy con el Maratón Popular. Ya sin restricciones. Después de dos años de ausencia y con cerca de 40.000 corredores pateándose los barrios de la capital. De las cuatro torres a La Almudena, del Parque de Atracciones al Santiago Bernabéu. Lo mejor está por llegar. Porque el abril lluvioso al que estamos asistiendo nos anticipa, refranero mediante, un «florido y hermoso» mayo. Con varias etapas que celebrar. Empezando por el Dos de Mayo, en el que, al margen de la fiesta regional, se rendirá tributo a gigantes de nuestra cultura como Luis María Anson o José Luis Garci. Siguiendo, claro está, con San Isidro. Hay muchas ganas. La Pradera volverá a recibir la visita de chulapos y chulapas. Por fin. Volveremos a ser capital del fútbol, con el Real Madrid disputando las semifinales de la Champions League. Epicentro también del tenis, con el Mutua Madrid Open a partir de esta misma semana. Pasos en la buena dirección. Seguimos.