Díaz esboza su proyecto con avisos a Podemos: «Sin crispar y sin ruidos»
► Lanzará «en breve» su «proceso de escucha» y a finales de año decidirá si es candidata, pero pide «autocrítica» a los partidos
Todo estaba preparado para que el «proceso de escucha» de Yolanda Díaz comenzase a principios de la primavera. La vicepresidenta se reconocía entonces con «ilusión» por emprender un nuevo camino político en el que poner a la ciudadanía en el centro de la mano de la sociedad civil. En su equipo aseguraban que «todo estaba listo» para entonces. Hasta la cartelería, de su futura plataforma estaba a punto. La guerra en Ucrania lo cambió todo y la urgencia de afrontar las consecuencias económicas para España obligó a la vicepresidenta a retrasar sus planes. Como adelantó este diario hace unos días, la vicepresidenta esperaba un revulsivo económico para volver a reactivar su «proyecto de escucha», que llegaría después de conocer los datos de paro.
Precisamente ayer, se daban a conocer estos datos que reflejaban una reducción de paro en 86.260 personas, mientras la vicepresidenta avanzaba que« en breve» reactivaría su proyecto, aunque en su equipo matizan que todavía tendrá que esperar y que no será este mes de mayo su lanzamiento. Haciendo gala de los datos de empleo y, precisamente 100 días después de que se convalidara la reforma laboral, la líder de Unidas Podemos en el Gobierno reivindicó que se lanza a trabajar ya «por un país diverso». «Levantando ese país, un país diferente, ahí me van a encontrar», garantizó, para después mandar avisos directos a los partidos que aspiran a acompañar en la vida política a la líder gallega en su futuro proyecto, entre ellos Podemos, que aspira a ser la «nave nodriza» de su plataforma. «No quiero políticas que confronten ni que dividan». Puso en valor la política «que no divide, que no hace ruido, que no crispa y no se espanta con los insultos y con el mal hacer». La vicepresidenta lanzó este mensaje en un desayuno organizado por Ep, donde si bien se encontraban el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, el ministro de Inclusión Social, José Luis Escrivá, el titular de Consumo, Alberto Garzón, el ministro de Universidades Joan Subirats o el secretario de Estado y líder del PCE, Enrique Santiago, no acudía –por agenda– ninguna de las ministras moradas, tan solo una representación de la Ejecutiva morada con la coportavoz Alejandra Jacinto.
Un acto en el que la vicepresidenta también estuvo arropada por la líder de Más Madrid, Mónica García y la portavoz Rita Maestre –con los que en algunos sectores de la confluencia de Unidas Podemos ven más sintonía con la vicepresidenta–o dirigentes morados como la diputada regional Carolina Alonso o los diputados nacionales Txema Guijarro, Antón Gómez-Reino, Lucía Muñoz Dalda y Aína Vidal.
Así, la vicepresidenta sentó las bases de su inminente proyecto para el que asegura no tener líneas rojas. «Estoy dispuesta a dialogar. No soy pura. No tengo miedo a conversar con nadie que no piense como yo y tengo mucho a favor para llegar a puntos de encuentro», explicó para lanzar más mensajes a los morados con el fin de resetear la vida orgánica de los partidos políticos.« Los partidos tienen que hacerse auto crítica. Da la sensación que en el viejo siglo XX y en el nuevo siglo XXI los partidos siguen tratando a la ciudadanía como si fueran menores de edad», lamentó.
En cuanto a cómo se organizará su «proceso de escucha», la vicepresidenta volvió a recordar que durará «seis meses» y que será en ese momento cuando medite si da o no el paso para presentarse como candidata. De hecho, reconoció que en estos momentos no está «en condiciones de dar ese paso», pero dejó la incógnita abierta de cara a finales de año.
En cuanto a la polémica que sacude al Ejecutivo por el espionaje a políticos independentistas y al Gobierno, la vicepresidenta se alineó con el presidente del Ejecutivo frente alas críticas de los ministros morados. Día zas eguróqueSánc he z había tomado la decisión correcta al hacer público que fue víctima del espionaje. « La gran decisión que ha tomado el presidente es la acertada: dar un paso adelante», zanjó, aunque sí pidió como Podemos, una comisión de investigación sobre Pegasus, que el PSOE vetó en el Congreso .« La democracia no ha de tener miedo a saber», sentenció.
Cierra filas con Sánchez por Pegasus: «La decisión del presidente es acertada»