Ribera amplía a cinco sus centros de referencia frente al cáncer de mama
► Los hospitales Povisa, Polusa y Denia se integran en este área del grupo
El grupo sanitario Ribera ha duplicado en un año sus centros de referenciapara pacientes con cáncer de mama, tras integrar en su Área de la Mama a los hospitales Ribera Povisa (Vigo), Ribera Polusa (Lugo) y Denia (Alicante), y se suman a los hospitales universitarios de Torrejón y Vinalopó.
Así, ya son cinco los hospitales del grupo integrados en el Área de la Mama del grupo Ribera, un servicio transversal multidisciplinar, formado por más de 86 profesionales de diferentes regiones españolas, que integra la visión de todas las especialidades implicadas en la patología de la mama de los diferentes centros y coordina su actividad asistencial y científica.
Gracias a su estructura y organización,los mejores especialistas en Radiología, Cirugía general, Ginecología, Cirugía plástica y reconstructiva, Anatomía patológica, Oncología, Enfermería, Medicina Nuclear, Oncología radioterápica, Rehabilitación, Fisioterapia y Psicología, entre otros, trabajan en red, como un único equipo, para poner el conocimiento, la innovación y la investigación de todos y cada uno al servicio de las pacientes, sea cual sea su hospital de referencia.
El modelo organizativo transversal de esta área permite definir procesos y circuitos asistenciales para las patologías de la mama, en especial del cáncer. Bajo la dirección de Julia Camps, este equipo multidisciplinar reúne a profesionales con más de 20 años de experiencia para dar a las pacientes una atención holística, personalizada y excelente. Junto al coordinador quirúrgico, Lorenzo Rabadán, y la coordinado procedimiento ra patóloga, Laia Bernet, Camps ha impulsado también un acuerdo estratégico con International Breast Cancer Center (IBCC), que facilita el acceso de las pacientes de los hospitalesRibera Po visa, RiberaPol usa, Denia, Vi na lopóyTorrejó na ensayos pioneros e investigaciones revolucionaria s sobre nuevos tratamientos contra el cáncer de mama.
«Es un honor contar con Javier Cortés como coordinado ronco lógicoasociado del Área de la Mama », asegura Camps, que además ha reiterado« la importancia del acuerdo estratégico con elIBCCy las sinergias que ya hemos creado, fruto de una colaboración sincera y leal, que busca por ambas partes facilitar el mejor diagnóstico, atención y tratamiento a estas pacientes».
«Un cáncer de mama en Vinalopó, por ejemplo, será valorado por especialistas de su hospital, pero también de Torrejón, Denia, Vigo y Lugo», explican. El objetivo es una Medicina de precisión, para que cada paciente cuente con el mejor equipo de profesionales en todas las áreas, además de los especialistas que realizarán el acompañamiento permanente y personalizado en el centro del grupo al que acuda.
La colaboración in ter hospital aria es, en opinión de los responsables del Área de la Mama, «un valor diferencial sin precedentes en el panorama del abordaje integral del cáncer de mama en España». La conexión de los mejores especialistas de cada área implicada en el proceso, sea cual sea su hospital de referencia ,« confrontan ideas, comparten conocimiento y experiencia clínica y unifican criterios de abordaje, de acuerdo a la última vanguardia», aseguran.
Camps destaca la experiencia, humanidad, inmediatez, implicación implicación e innovación del Área de la Mama del grupo Ribera y explica que las pacientes tienen a su disposición «un diagnóstico rápido con las últimas técnicas radio diagnósticas y la mejor Anatomía patológica, el abordaje integral del cáncer de mama, incluida la reconstrucción mamaria, y el apoyo emocional que todas las mujeres necesitan en las diferentes fases, desde el diagnóstico hasta el tratamiento y/ o intervención quirúrgica, por ejemplo, con las enfermeras gestoras de casos».
Además, la apuesta por la tecnología en los hospitales que se han integrado en este área facilita el diagnóstico de los profesionales y el tratamiento de las pacientes. Los hospitales universitarios de Vinalopó y Torrejónn cuenta con mamógrafos 3D con contraste, que tienen una sensibilidad hasta un 30% mayor en la detección de tumores tumores que la mamografía convencional capaz de detectar tumores de apenas 4 mm. Además, permiten realizar biopsias por tomosíntesis, con el fin de tomar una muestra del tejido mamario con gran precisión e imágenes tridimensionales. Los hospitales Ribera Polusa y Denia, por su parte, acaban de estrenar nuevos mamó grafos 3 D de última generación.
Innovar para curar
Hace unos meses, el Área de la Mama del grupo Ribera revolucionó el diagnóstico del cáncer de mama al poner en marcha un proyecto piloto, único en España, para realizar la firma genética en la biopsia inicial, en el tejido sobre el que se realiza el diagnóstico de cáncer. Hasta ahora, este estudio se realizaba en el tejido procedente de la extirpación quirúrgica, que es el habitual. El proyecto se ha organizado para obtener los resultados en un tiempo récord, de 48 horas, y no los 15 días habituales en este tipo de estudio genético. La coordinadora de Patología del grupo, Laia Bernet, explica que «la información obtenida es clave para el plan clínico y quirúrgico de cada paciente y puede cambiar ese plan terapéutico hasta un 40% de los casos». «Supone un gran avance a todos los niveles», añade.
El coordinador quirúrgico del Área, Lorenzo Rabadán, asegura que gracias a la amplia información que se tiene antes de la intervención, a la personalización del tratamiento y a las técnicas avanzadas de cirugía oncoplástica «podemos hacer las resecciones necesarias, sin modificar el volumen o la forma de la mama para conseguir un resultado oncológico y estético óptimo». Gracias a ello, se recurre a la cirugía conservadora en el 80% de los casos.
Además, varios de los hospitales del grupo, como Torrejón, Vinalopó y Povisa, cuentan con un servicio de tatuaje del pezón, para aquellos casos en los que es necesaria una reconstrucción posterior a la cirugía. «A las pacientes les da mucha confianza cerrar el proceso de su enfermedad con la reconstrucción completa y el tatuaje del pezón en el mismo hospital en el que les hemos tratado», explican los profesionales.
“Uno de nuestros avances es que hacemos que el proceso sea rentable, tanto económicamente como energéticamente: generamos más energía de la que consumimos”
Nantek es una empresa que transforma el residuo plástico en productos petroquímicos de segunda vida como combustibles sintéticos e hidrógeno
NantekNantek ha desarrollado una tecnología basada en pirólisis que, junto al uso de nanoelementos, convierte el plástico en combustibles de segunda vida. “Con esto se elimina el problema del plástico y hacemos que, en lugar de enviarlo a vertederos o incineradoras, lo enviamos a nuestras plantas de transformación, donde se le da una segunda vida y cerramos así su ciclo de vida haciendo economía circular”, comenta Carlos Uraga, CEO y fundador de Nantek.
Oímos muchas veces que el plástico es el gran enemigo a vencer… ¿Es así realmente?
Siempre decimos que este mensaje es erróneo, el plástico no es el enemigo. El plástico nos permite ahorrar energía en la fabricación, incluso nos hace ahorrar millones de litros de agua. El plástico fue lo que sustituyó a muchos materiales como los metales, y sus propiedades nos han hecho llegar hasta aquí en aspectos clave como la medicina o la conservación de alimentos, por ejemplo, por lo tanto, eso no es malo.
El problema real es el residuo plástico mal gestionado, es decir, que no le demos una segunda vida después, como hacemos con el vidrio o con los metales.
Es cierto que generamos mucho plástico para usar y tirar, pero basta con que a la hora de “tirar” hagamos que llegue a nuestras plantas y que sea entonces transformado de nuevo en petroquímicos de segunda vida. Con esta tecnología podemos producir combustibles libres de sulfuros, podemos producir hidrógeno e, incluso, podemos producir otras cosas como nuevos plásticos o queroseno.
Por lo tanto, la idea tiene que quedar clara: el plástico no es el enemigo, el enemigo es el residuo plástico mal gestionado.
¿Cuáles son los problemas que nos puede provocar el plástico mal reciclado?
El plástico mal tratado en su reciclaje, sin embargo, sí es dañino en muchos aspectos, desde los microplásticos hasta, sobre todo, la destrucción de ecosistemas marinos cuando vemos todo lo que ya hemos lanzado al mar.
La gente habla mucho de que hay islas de plástico en el mar, pero lo grave es que no saben que, por lo general, de los nueve tipos de plásticos que encontramos en el uso cotidiano, sólo dos de ellos flotan, es decir, que hay mucho más plástico en el interior de los océanos que en la superficie. Por lo tanto, medioambientalmente hablando, el residuo plástico es un gran enemigo como lo son los residuos nucleares o las aguas contaminadas que muchas industrias vierten al agua.
Leí un artículo sobre un gusano que comía plástico y lo transformaba en materia orgánica, ¿un poco hacéis lo mismo, pero con combustible?
Hacemos algo parecido, pero con tecnología, y lo hacemos en toneladas por hora, es decir, las soluciones orgánicas como esa reno quieren de almacenar miles de toneladas en un lugar durante meses o años para que vaya desapareciendo, nosotros, por cada planta, seremos capaces de eliminar 25.000.000 de kilos de plástico cada año (o lo que es lo mismo, 25.000 toneladas).
¿Qué usos tiene el combustible? Y, quizás más importante de cara al futuro, ¿es rentable el proceso?
El combustible se puede utilizar exactamente como lo utilizamos hoy. Es decir, nosotros se lo vendemos a la industria de Oil&Gas y de transporte, de manera que se utiliza para maquinaria, vehículos, calefacción, etc. Es un combustible como los que conocemos a día hoy, pero más limpio ya que no trae sulfuros.
Y sí, uno de nuestros avances es precisamente que hacemos que el proceso sea rentable, tanto económicamente como energéticamente, es decir, generamos más energía de la que consumimos. Esto es clave.
Y hablando de futuro, ¿hacia dónde avanza Nantek?
Nantek pretende ser una compañía de soluciones sostenibles, es decir, no nos quedaremos exclusivamente en generar combustibles, sique sique nuestro objetivo es hacer que la humanidad, empezando por nuestro propio país, sea sostenible y autosuficiente energéticamente.
Además de esto, pretendemos desarrollar tecnologías de limpieza de los océanos, por ejemplo, o también trabajamos en nuevos materiales que permitan el manejo de la electricidad sin pérdidas, todo siempre enfocado a que emitamos menos calor como civilización y que el planeta note menos nuestra presencia.
Vemos que el ser humano crece de forma infinita en un planeta de recursos finitos, por lo tanto, si no empezamos a desarrollar tecnologías como ésta, que nos permitan generar más energía con nuestros propios recursos (y no agotando los de la tierra), llegará un momento en el que seamos irremediablemente insostenibles, y entonces tengamos que recortar el uso de la energía. Pretendemos avanzar en medidas que permitan que nuestra civilización no colapse, básicamente.
¿Y cómo se relaciona todo esto con la crisis energética y el autoabastecimiento?
España, por ejemplo, tiene un problema de autoabastecimiento energético: generamos menos del 30% de la energía que consumimos y esto nos hace vulnerables y dependientes de otros países, además de basar nuestro modelo energético en los combustibles fósiles ya que más del 50% de la energía que utilizamos es generada precisamente con combustibles. Por lo tanto, dependemos de los precios que nos marcan sin poderlos controlar como país.
Iniciativas y tecnologías como la nuestra nos permitirían, no sólo eliminar el problema del plástico y dejar de utilizar vertederos o incineradoras, sino que nos permitirá cubrir gran parte de la necesidad energética con nuestra propia generación. Y esto es un cambio de paradigma en nuestra economía, ya que, si convertimos nuestra basura plástica en combustible, hablamos de que cubriríamos gran parte de la demanda energética y no seríamos tan permeables a los cambios de precio del petróleo, sino que empezaríamos a ser autosuficientes y a tener unos precios por la energía controlados y sin grandes cambios.
Nuestro objetivo es llegar a una situación en la que como país podamos controlar precisamente un aspecto tan clave de nuestra economía como es la energía, pero que, además, lo hagamos de forma completamente sostenible, solucionando un problema medioambiental y también un problema socioeconómico, mejorando así el estado de bienestar en esos dos aspectos.