Bonus Track
Ayer fui a comprar un producto que, en mi casa, es de primera necesidad. Sección alimentación. No diré la marca, ni de qué se trata, porque no pretendo perjudicaranadie. El caso es que me topé con una desagradable sorpresa: la bolsa que antes pesaba 2 kilos, ahora es de1’ 5kg ., aunque el precio sigue siendo el mismo. Me petrifiqué con la mano en el monedero, yendo a pagar, cuando noté algo raro. «Pero, ¿esta bolsa es la misma del mes pasado?», pregunté. «No, han cambiado el diseño, aunque la composición del producto es la de siempre», me respondió el dependiente mientras pasaba mi tarjeta de débito por el terminal. «Pero, parece que la bolsa es más ligera, ¿es un nuevo formato?». (La curiosidad mató al gato. Y a mí). El empleado lució una sonrisa incómoda: «Sí, es el mismo formato. De bolsa. Pero ahora
«La bolsa que antes pesaba 2 kilos, ahora es de 1’5»
pesa medio kilo menos». Lo miré confundida: «La bolsa es igual de grande, aunque con más aire dentro. ¿Medio kilo menos, por el mismo precio …?», calculé, pasmada .« Así es », me confesó el muchacho, ruborizado.
500 gramos menos de producto, de un total de 2.000 gramos, significa que la marca ha hecho una subida encubierta de precio ¡¡de un 25%!! De un cuarto del precio total. ¿Pero…, la inflación no era (abril 2022) de un 8’3%, aparentemente un 1’5 puntos menos que en el mes anterior, y en alimentos y bebidas, anual, de un 10’1%? Pues yo encuentro muchos «porcientos» que duplican esas cifras. ¿Cómo se establece el índice de precios al consumo?, ¿la inflación…?, ¿de dónde salen los datos, cuáles son los indicadores, quién los elije, con qué criterios…? Se nos dice que ahora mismo soportamos un 8’3 % de inflación, pero mi experiencia duda de esa cifra.