Cuando Europa no podía dejar de bailar
►Aunque el verano que antojan ya las temperaturas invite a lo cómico, lo cierto es que la «coreomanía» que comenzó en el siglo XV en Europa es uno de los fenómenos médicos que más misterios suscita entre científicos e historiadores. A pesar de que hubo casos registrados desde el VIII, no fue hasta 1518 en Estrasburgo cuando la enfermedad tomó relevancia popular. El brote de aquel año, en el que se sucedieron bailes hasta la muerte en hasta siete tandas, bien podría explicarse a través de un envenenamiento por Cornezuelo, pero se hace insuficiente por la masa del brote, que llegó a congregar hasta a 400 personas. Explicaciones modernas se inclinan por la encefalitis, pero nadie sabe a ciencia cierta por qué Europa no podía dejar de bailar.