Prevenir y curar a los padres
► Si la transmisión de la enfermedad se produce porque los pequeños crecen en un entorno donde esos comportamientos son una referencia pueden observarse diferentes patrones en función de cuál de los progenitores tiene más influencia en la formación del carácter en las etapas primeras del desarrollo.
► Las niñas con una madre con depresión o ansiedad tenían hasta tres veces más de probabilidades de desarrollar la misma patología. Sin embargo, los niños con un padre afectado no parecen tener más riesgo de heredar el mal. Además, si el progenitor no padece trastornos, los hijos varones tienen menos probabilidades de desarrollarlos.
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El estudio constata que, sea cual sea el origen, muchos trastornos mentales interfamiliares podrían ser tratados e incluso prevenidos con intervenciones en la parte adulta de la familia. Prevenir y curar la ansiedad en los progenitores puede reducir las tasas de esta patología en los niños, cuyas cifras no paran de crecer.
► El 80 por 100 de los jóvenes y niños que sufren ansiedad y depresión no reciben tratamiento, según datos de la institución internacional Child Mind. Aproximadamente 117 millones de menores de 16 años han pasado algún episodio de ansiedad patológica, que se manifiesta con una sintomatología muy variada.