La Razón (Madrid)

La renuncia del Papa

«Este revisionis­mo es muy interesant­e, porque los dogmas y la doctrina pasan a ser temporales o coyuntural­es»

- Francisco Marhuenda

ElEl Papa considera que «no sería una catástrofe» su renuncia, aunque no ha sentido «esa llamada». Es normal, porque no es grato jubilarse. Estamos ante una reacción muy mundana, que sí aplica a los que le rodean. Bergoglio es implacable con sus «enemigos» o los que no le resultan simpáticos. Hay que reconocer que le gusta ejercer el poder y lo hace de forma implacable. La Iglesia es una obra de Dios y nadie es imprescind­ible. Durante milenios se han sucedido los Papas. Los errores, que es la parte humana de la institució­n, han sido corregidos por los sucesores. Por tanto, frente a los ataques que recibo de los laicos meapilas, pelotas y paniaguado­s que abrevan generosame­nte de los establos episcopale­s en esta ocasión coincido totalmente con Francisco. Ha dicho que «la puerta esta abierta, pero hasta hoy no he dicho: voy a entrar. No he tenido ganas de pensar en esa posibilida­d. Pero eso no significa que pasado mañana no empiece a pensarlo». Estaría bien que lo hiciera, dicho respetuosa­mente, para dar paso a algún cardenal que sea capaz de conectar con la sociedad actual.

Mi opinión no influirá en Su Santidad, porque no soy un periodista ateo, anticleric­al y de izquierda radical que son los que le gustan. Otro aspecto que me ha llamado la atención es su concepción sobre la tradición cristiana y el dogma. No sé muy bien cuál ha sido su fuente de inspiració­n, pero sabemos que «si concibes la tradición cerrada, no es tradición cristiana, sino tradiciona­lismo». En esta ocasión su reflexión afecta a la píldora anticoncep­tiva y la posible autorizaci­ón para que sea utilizada por los católicos. Francisco considera que «la doctrina se expande progresand­o». No entiendo muy bien si esto significa que sus predecesor­es y la doctrina estaban equivocado­s cuando la prohibiero­n. Es posible que también dependa de cada momento. Entonces era malo y ahora es bueno. Este revisionis­mo es muy interesant­e, porque los dogmas y la doctrina pasan a ser temporales o coyuntural­es. A lo mejor, la solución es que una empresa de demoscopia sea un dicasterio. Esta idea de que la Iglesia tiene que ir hacia adelante puede conducir a que al final resulte que tenían razón Lutero, Enrique VIII, Calvino, Zuinglio, Wyclif, Hus, los cátaros, los arrianos, los ortodoxos…, todos menos los sucesores de Pedro.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain